
AYUDAME A SALVAR UNA VIDA
DIA 14
Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?
Conviértete no es entrar a una Iglesia y participar de un retiro o acto litúrgico católico, de la prédica de un pastor con todo un excelente montaje en su escenario, acercarse a recibir una imposición de manos y quedar al instante convertido.
La conversión es todo un proceso de conocimiento y asimilación de la Palabra de Dios, de apertura al amor de Dios, de purificación para acoger la presencia del Espíritu Santo en tu interior, es un cambio de actitud y comportamiento sostenible en el tiempo que reflejen la presencia de Dios en tu corazón.
No es cuestión de un momento, por eso he querido que caminemos juntos estos 40 días de preparación espiritual, para darle entrada en tu vida a la presencia de Dios, para iniciar un proceso firme y profundo de conversión, esto implica luchar contra el pecado y renunciar a todo lo que nos aleja de Dios.
De esta manera vamos a obtener el perdón de Dios y su aceptación, pero haciendo ayuno, absteniéndonos de lo que nos cuesta, intensificando la oración, con sacrificios y medidas radicales frente a lo que nos desvía de Su Presencia.
Cuando estemos quebrantados y humillados, entonces Dios hará su obra en nosotros, pues tal como nos dice el salmo 50, un corazón quebrantado y humillado, tú, Dios mío, no lo desprecias.
Rómpete por dentro, siente el dolor de las cosas mal hechas de tu vida, arrepiéntete de verdad, humíllate ante Dios, póstrate en el piso ante Él y verás cómo se glorificará en ti y te transformará, trayéndote paz, llenándote de su amor, y revelándote sus planes para contigo.
Víctor Martínez te recuerda que, la Cuaresma es un tiempo precioso y propicio para que, en el don de gracia de sus cuarenta días, el alma se convierta y el corazón purificado se dirija a Dios.
Anímate y ven a caminar con nosotros.
Un gesto hermoso hoy, sería dedicar un tiempo a revisarte en tu interior, confesar tus pecados ante tu Dios, reconocerte pecador, si eres católico, hacer una buena confesión con un sacerdote y recibir el perdón de tu Señor.
Gracias a nuestra hermana Arián Troncoso, quien se unirá hoy en oración por quienes están caminando con nosotros y por hacer posible que este mensaje llegue hasta todos ustedes.
Hasta la próxima.