Reflexiones: Abandonar la escuela

Ayúdame a salvar una vida
Hola amigos, ¿qué tal? Abandonar la escuela es una acción que resulta alarmante, tal como lo sería que un chico abandonara el hogar y se desprendiera de los brazos de quienes deben darle el sustento, la protección, la educación y todo el afecto necesario para crecer sano.
A este fenómeno le llamamos deserción escolar, problema educativo que afecta al desarrollo de la sociedad, y se da principalmente por falta de recursos económicos.
Cuando a un estudiante le va mal académicamente la solución no es dejar la escuela, tampoco lo debe ser la falta de recursos económicos en las familias más necesitadas, ni la orfandad.
El Estado, el Ministerio de Educación, la Iglesia, los Empresarios, todos debemos unirnos para combatir este flagelo de la sociedad, pues las consecuencias de heredar una generación de chicos y chicas sin escolaridad tiene un alto costo para la sociedad.
Víctor Martínez piensa que debemos gastar menos dinero en politiquería y destinarlo a las necesidades de los mas pobres.
Si en algo debemos defender al menor es en sus derechos a recibir una buena educación.
Hoy levanto mi voz para remover las conciencias de quienes podrían aportar su granito de arena ayudando a enfrentar este gran problema.
Nos dice el Señor en Proverbios 22: “Instruye al niño en el camino correcto”, y es que para Dios los menores tienen un lugar especial a su lado y todos como buenos cristianos que somos deberíamos defender la niñez.
Hasta la próxima.