REFLEXIONES: Hoy es un día muy especial

AYÚDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola, amigos, ¿qué tal? Hoy es un día muy especial, es Navidad, sobre todo para quienes dimos entrada al Niño Dios en nuestros corazones, hoy nos levantamos con la dicha de saber que una vez más el Salvador ha llegado a nuestras vidas a rescatarnos, es un sentimiento de felicidad muy especial, pues en medio de las fiestas y celebraciones, de las penas que se remueven y disimulamos, y la alegría de recibirlo, vivimos en nuestro interior un retiro y recogimiento espiritual paralelo a la algarabía de los demás.
No es fácil, pero se puede, en nuestro momento de oración, al asistir al templo, al poner nuestra cabeza en la almohada, al retirarnos por unos minutos y aislarnos, si somos de Dios, queremos a Dios, buscamos a Dios y abrimos nuestro corazón a Dios, nuestra conciencia nos estremece y nos vemos obligados a recordar lo mal hecho, a pedir perdón al Padre, y a perdonarnos a nosotros mismos, es entonces cuando perdonamos a quienes nos han ofendido y recordamos a quienes ofendimos elevando una oración poderosa por ellos donde quiera que se encuentren.
Esto es Navidad, permitir que el Niño Dios nazca en nuestros corazones, haciéndonos el propósito de ser mejores personas, luchar contra las tentaciones y honrarlo y glorificarlo en nuestro interior, dando muestras donde quiera que vayamos, de que soy como soy, porque tengo a Dios en mi corazón.
Víctor Martínez les desea muchas felicidades, mis queridos hermanos, y recuerda, todavía hoy puedes dar entrada al Niño Dios a tu corazón.
Hasta la próxima.