El presidente del PLD… su verdad
Por Augusto Álvarez
Cuando el profesor Juan Bosch decía algo en el partido, se respetaba, y hasta donde quizás también se recuerde, cuando el cacique Hatuey tronaba, también se solía obedecer.
La disciplina en los partidos se ha perdido, creíamos que luego de que el ingeniero Temístocles Montás anunciara la participación en un debate, del aspirante presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), Gonzalo Castillo, no fallaría, pero reculó otra vez.
El presidente del PLD ha sido desobedecido por el aspirante presidencial de su organización, y al recordar la ¡sinceridad! del político al aceptar que cayó en la redes de Odebrecht, no sospechamos que su autoridad política fuera desafiada.
Echándose todo el lodo de Odebrecht, el ahora presidente del PLD, además de admitir haber sido salpicado, sería oportuno responda ¿hasta dónde llega su autoridad en la organización de gobierno?
El ingeniero Montás, un dirigente de la confianza del mandatario (aunque lo metió preso por el caso Odebrecht), debió solicitarle que convenciera Gonzalo, de manera que no fallara en el cara a cara (y altamente observando el protocolo) y expusiera a los electores lo que haría de llegar a la Presidencia.
Al parecer, Castillo sólo responde a un mando, y al distanciarse de los periodistas que no están en nóminas, ¿no se aísla de quienes votan?
¿ Por qué recular a la hora de asumir la defensa de su partido en un escenario abierto, a qué teme el señor Gonzalo Castillo?
