El verdugo de Baní cantó como gallo y ahora cacarea como gallina
Por Augusto Alvarez
BANI, R.D.
La noche del 31 de diciembre, un elemento, que posteriormente fue identificado como Alexis Villalona y bautizado como el abusador de Baní, pistola en manos, dio una golpiza a una joven mujer, madre de 4 niños.
Ese día, el abusador cantó como un gallo, 17 días después, sin la pistola en sus manos y ante la justicia, el verdugo de mujeres está cacareando como gallina.
Así son los abusadores… Ahora debemos esperar, porque como otros, es posible que en cualquier momento aparezca con una biblia en las manos, dándose golpecitos en el pecho.
Eso está pasando actualmente en República Dominicana, con otros que eran un leones en sus guaridas, y como hoy están tras las rejas, andan con una biblia en las manos, pintándose como humildes angelitos.
El abusador está pidiendo perdón, como era de esperar, y es que así son los cobardes.
Pero, el chiste más agradable y que da risas, ¡sí! de ese mismo abusador, es su embuste de que no se entregó a las autoridades, porque pensaba que estaba contagiado de Covid-19. ¡Barbarazo!
«Fue un error, pido disculpas a la señora, yo nunca había caído preso», expresó el verdugo en tono suplicante, aunque sus vecinos lo definen como un individuo sumamente violento, altanero y arrogante.
Otra cosa que llama la atención son sus declaraciones de que estaba bebido. Sin embargo, tras darle la golpiza a Santa Arias, en plena vía pública, tuvo la osadía de escoger como guarida una residencia ubicada detrás de un cuartel policial, en el sector El Fundo, de Baní, donde nadie podría imaginarse que estaba encuevado tan cerca de las autoridades, de sus persecutores.
La medida de coerción, que el lunes le sería conocida, fue reenviado para el jueves 20, cuando su savia defensa tratará de buscar que el caso sea declinado a un juzgado de paz por tratarse, me imagino que así lo dirá, de una simple riña. ¿Amante de la ridiculez?
«Tenía temor, sentí miedo”, volvió a suplicar el abusador de mujeres, tras ser apresado, dejando atrás el pasado cuando estuvo a punto de cometer un feminicidio (darle muerte a una mujer) tras un accidente de tránsito, que él mismo provocó.
Esa noche, Alexis Villalona cantó como un gallo y hoy busca que le acondicionen un nido para poner como una gallina.
