Kim Jong-un inspecciona su satélite de reconocimiento militar

PYONGYANG
El líder norcoreano, Kim Jong-un, visitó el martes, junto a su hija, el centro de desarrollo espacial nacional en Pyongyang, para inspeccionar el satélite de reconocimiento militar, que ha sido completado este mismo mes, según informó este miércoles la agencia oficial local KCNA.
El máximo titular norcoreano enfatizó que el lanzamiento del dispositivo satelital tiene como objetivo proteger “el entorno de seguridad y la integridad territorial del Estado”.
Además, proteger “los intereses de seguridad y desarrollo del pueblo de la creciente amenaza y desafío militar de Estados Unidos y Corea del Sur”.
Denunció que “Corea del Sur se ha convertido en un polvorín y en una avanzadilla de agresión, debido al despliegue constante en la península de Corea de diferentes e importantes activos estratégicos”, haciendo referencia al despliegue de portaviones y bombarderos estadounidenses en las costas surcoreanas.
Kim detalló que el desarrollo espacial es un “factor clave” de cara a convertir un país en un “referente en áreas como la economía, la ciencia y la tecnología”, y dijo que poner en órbita un satélite de reconocimiento militar resulta necesario “para reforzar las Fuerzas Armadas de Corea del Norte”.
Adelantó que su gobierno tiene programado colocar diversos dispositivos satelitales de reconocimiento “en diferentes órbitas en sucesión en el futuro” a fin de mejorar su capacidad de recopilación de inteligencia satelital.
En diciembre, Pyongyang lanzó un dispositivo espía de prueba que tomó fotos de Corea del Sur y anunció que planeaba poner en órbita un satélite militar de reconocimiento para abril.
Corea del Norte ha lanzado cinco cohetes espaciales —el último en febrero de 2016— con los que aseguró que buscaba poner satélites de observación en órbita.
Occidente, sin embargo, acusa a Pyongyang de desarrollar su tecnología de misiles balísticos bajo cobertura de programas espaciales.
Kim, a su vez, ha reconocido abiertamente que el objetivo de su país es construir el mayor arsenal nuclear del mundo y “poseer la fuerza estratégica más poderosa del mundo” para proteger de manera confiable la dignidad y soberanía de su pueblo y Estado ante las amenazas y provocaciones de EE.UU. y Corea del Sur.