Religiosos y comunitarios ven alarmante delincuencia en RD
Monseñor Bretón pide a autoridades evitar más dolor
LICEY AL MEDIO, R.D.- La delincuencia que azota al país y que las autoridades no han podido, por lo menos, control, sigue tocando puertas importantes y es calificada por religiosos y comunitarios como alarmante.
En esta ocasión la víctima fue un hermano del arzobispo de Santiago, monseñor Freddy de Jesús Bretón Martínez.
Dos delincuentes lo asesinaron para despojarlo de su motocicleta.
Domingo Bretón Martínez fue asesinado el sábado cuando se dirigía a su casa, en su motocicleta, tras finalizar una ardua jornada de trabajo.
Sus familiares, amigos y vecinos reclaman justicia y control de la delincuencia, para que otras familias dominicanas no pasen por igual situación.
Bretón Martínez fue asesinado de una estocada al ser asaltado por dos jóvenes forajidos, en la carretera Moca-Licey.
A la misa de cuerpo presente, encabezada por su hermano, monseñor Freddy Bretón, asistieron numerosos obispos, tanto activos como eméritos de diferentes puntos del país, así como una gran cantidad de sacerdotes y diáconos.
Entre esos obispos figuran Héctor Rafael Rodríguez, de La Vega; Jesús Castro, de la Arquidiócesis de Santo Domingo; Rafael Felipe, Benito Ángeles, Tomás Diplán Morel y Valentín Reynoso.
En la misa, monseñor Bretón lamentó los altos niveles de violencia que existen en el país y llamó a las autoridades a que enfrenten la delincuencia.
Aclaró que no hace el llamado porque se trate de su hermano, sino para evitar que esos antisociales sigan cometiendo hechos similares en las calles y llevando el dolor a otras familias dominicanas.
Durante la misa de cuerpo presente oficiada por el arzobispo Freddy Bretón, el prelado
El líder religioso reclamó de las autoridades frenar la delincuencia.
En la misa y durante el sepelio, dirigentes religiosos y comunitarios coincidieron en señalar que los esfuerzos que dice realizar las autoridades competentes para “controlar” la delincuencia que azota al país, únicamente se refleja en los medios de comunicación, “con olor a reelección y para mantenerse en sus cargos”.
“Si las autoridades dieran a conocer la cantidad de hechos delictivos que ocurren en el país, aquí todos saliéramos huyendo, aunque sea para Haití”, señalaron.
Hubo uno de los obispos que llegó a decir, fuera de récord, que la delincuencia está provocando que se incrementen hasta los viajes ilegales, que ya estaban controlados.
