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Cantan 30 años a forajidos asesinaron al ingeniero Guzmán Beato

SANTO DOMINGO ESTE, R.D.- El Segundo Tribunal Colegiado de la provincia Santo Domingo impuso pena máxima, 30 años de reclusión mayor, a los tres malhechores que, de manera cobarde, asesinaron a un hermano del conocido periodista José Beato, secretario General del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP).

Los sentenciaron son los reconocidos delincuentes Jeury Pérez (Cartier), Feliz Manuel Ferrera (Yener) y Alfredo Consoro (Alfredito), encontrados culpables del asesinato del ingeniero Teodoro Guzmán Beato, hecho acaecido en fecha 25 de diciembre del año 2016, en el poblado turístico de Boca Chica.

El tribunal acogió la mayoría de las pruebas presentadas contra los tres criminales, que demostraron responsabilidad penal en el asesinato del ingeniero Guzmán Beato.

Estos tres criminales, y otros que están prófugos por diferentes delitos penales, se habían convertido en el terror del municipio de Boca Chica, controlando el tráfico de drogas en esa zona.

Además, integrantes de esa banda de delincuentes han sido señalados como “peligrosos asaltantes”.

El tribunal estuvo presidido la jueza Josefina Ubiera e integrado por Marleny Altagracia Santos y Flor Batistas, encontrando a los tres forajidos culpables violar los Artículos 265, 266, 295, 296, 297, 302 y 304, del Código Penal Dominicano, que sancionan la asociación de malhechores y el asesinato.

También, en la violación de varios artículos de la Ley 631-16, sobre Control y Regulación de Armas, Municiones y Materiales Relacionados.

El tribunal acogió la querella presentada por el abogado Valentín Medrano Peña, actor civil en el proceso e impuso a los condenados el pago de tres millones de pesos de indemnización a favor de los familiares de la víctima.

La fiscal Marlene Roa, del Departamento de Litigación Definitiva, quien está al frente de la barra acusadora, estuvo a cargo la presentación de las pruebas que lograron destruir la presunción de inocencia que revestía a los justiciables, logrando la imposición de la pena máxima.

El ingeniero Guzmán Beato era jugador de beisbol y había sido gerente de varias empresas.

Los investigadores policiales atribuyen que los delincuentes asesinaron al ingeniero Guzmán Beato, cuando al parecer pretendían matar a otra persona.

Un cuarto implicado fue juzgado y condenado en el tribunal para Niños, Niñas y Adolescentes, a quien aplicaron la pena máxima en esa jurisdicción, consistente en 8 años de reclusión, en una correccional para menores.

En tanto, a Jerry de Oleo Félix, acusado también en el crimen, le fueron retirados los cargos en el proceso de instrucción, luego que se comprobara que no estuvo en el lugar de los hechos y mostrara disposición de colaborar para aclarecer el suceso.

La sentencia del tribunal dispone que los tres sentenciados cumplan la pena en la Penitenciaría Nacional de La Victoria, donde se encuentran recluidos.

La lectura integra de la sentencia fue fijada para el 26 de febrero del año en curso.

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