Reflexiones: Semana del Amor
Hola amigos, ¿qué tal? Una vez más celebramos el 14 de febrero, estaremos conversando acerca del tema amor.
El comercio feliz, las blusas y camisas rojas salen de los armarios, algunos declararán su amor con flores, chocolates, regalos caros y baratos, va a depender del bolsillo y del estatus de la chica, si la estoy mueliando, si es novia, esposa o…
Algunos quieren comprar el amor con regalos caros y algunas se venden por un regalo. Misterios en las oficinas, testigos los baúles de los vehículos, dos celebraciones en el día, al mediodía y en la noche, pero no para la misma o el mismo. Sólo se puede amar de verdad a una persona, enfócate.
Algunos se frustran por no recibir nada, y otros se adelantan anunciando su soltería, otras callan por un amor prohibido.
En fin, el amor manifestado en el peor de los escenarios, muy diferente a lo que es el verdadero amor.
Muchos han bautizado la fiesta, como el día de la amistad, así ni quedan feos, ni se sienten solos y siempre va a aparecer un amigo o amiga con un corazoncito: “Feliz día de San Valentín”.
Víctor Martínez piensa que una forma muy hermosa de celebrarlo, además de todo esto, es dándole un sentido más cristiano, ya que se trata de un San.
Vamos a comprar un gran bizcocho y vayamos a compartirlo en un hogar de ancianos o de niños huérfanos.
Así Dios, el creador del Amor, habrá recibido sus regalos.
Recuérdalo: “Ayúdame a salvar una vida.”
Hasta la próxima.
