La Moral, en tiempo de abuela…

Si preguntáramos a una joven que es una enagua (un refajo), de seguro desconoce la respuesta.
Al aproximarnos más en el tiempo nos interesamos por saber si tampoco escuchó a la madre referirse al «medio fondo», o zapatos «macho y hembra», sin obtener por parte de ella, ninguna respuesta.
Eso si, por la abuela, tal vez escucharon hablar de «la cretona», una moda del pasado que dejaba poco a la imaginación masculina.
Posiblemente, antes de 1972, ninguna persona (ni rica ni pobre) se atrevía a salir a la calle con pantalones» remendados o deshilachados, pues hacerlo se consideraba para aquellos tiempos, vergonzante.
La moda siguió trazando la pauta, hasta llegar a la máxima intimidad de la mujer, diseñando ropa interior bautizada como hilo dentales.
Pese a unos tutores y padres formados criados con una férrea disciplina, la moda rompió el estrecho círculo familiar, hasta que ya la liberación del busto avanza en algunos lugares.
En la zona rural costó mucho a las esforzadas señoras, lograr que sus compañeros, aceptaran ellas usaran pantalones, ahora ellos mismos se los compran.
Los tiempos cambian…