¡Oh, señores! Delincuencia arrasa ¿o es percepción?
El teatro delincuencial se apoyó en el Día de los Padres, para invadir las redes de sangre y muertes.
En escena, en Paya, de Bani, Roydi de Jesús Pimentel, perdió la vida, al originarse un tiroteo en el Parque de dicha pequeña localidad.
El recorrido delincuencial cambió el teatro operacional, y en San Francisco de Macoris, concretamente en Arenoso, de un certero disparó, ultimaron a Melvin Francisco Peña, según reportó la Policía, que añadió el occiso recibió un disparo en el rostro, mientras se desplazaba en una moto.
Siguen el mismo hilo delincuencial, los delincuentes eliminaron a José Luis Valerio, cuando este se negó a dejarse quitar la motocicleta donde viajaba en compañía de su esposa Angela Mercedes Peña.
Sin prisa, y sin importarle la presencia del cadáver, los criminales también se llevaron el celular de la dama.
En la trágica fecha del domingo, la delincuencia llegó al Ensanche Espaillat (aunque no figura en el rosario de crónicas de la PN), la sangre, primero, e inmediatamente por el mismo orificio de donde escapaba el líquido, llegó la muerte.
¿Resulta la violencia delincuencial, o se trata de una percepción de la ciudadanía? Juzguen los lectores.
