Multas fantasmas, corrupción o atraco

Por Augusto Álvarez

¡Oh, increíble! Miles de ciudadanos obligados a «negociar» para pagar una deuda inexistente.

Aún se ignora si se trata de un plan en pequeña escala para recolectar recursos para la campaña en curso, una de las más costosas de nuestra historia.

Se busca que quienes nada deben de multas, paguen la mitad, mientras la otra, la ley la perdona ¿qué diabólica cabeza tuvo tal genialidad?

La autoridad situada por encima que los que ordenan fabricar multas para obligar a las víctimas a pagar, buscan agradar a los dueños del circo.

Mientras se hablar de la multiplicación de los planes, expertos oficiales se dedican a fabricar multas a quienes nunca han conducido ni patinetas.

Sin embargo ¿ no se conoce de ningún dirigente político que haya salido a denunciar ésta modalidad de atraco o corrupción oficial?

Antes de que nazca una nueva vida, ya adeudara algo a las autoridades, si la dignidad no aflora en tiempo real.
¿Podría una orden impedir que ese atraco oficial de pagar sin deber se siga implementando?

Cualquiera pensaría que las infracciones falsas constituyen una fuente más de recaudación de fondos para la campaña, que una forma de provocación a los votantes.