El León y la seguridad

El doctor Leonel Fernández, de conformidad con declaraciones suyas que hemos leído, ha dado en el blanco sobre la seguridad.
Ha dicho el expresidente de la República que prefiere ver un chinero (léase agente encubierto) en un barrio, vigilando la lucha contra la delincuencia y al narco, que a un hombre con fusil y chamaco.
Lo dicho por el doctor Fernández nos recordó el libro “¿Por qué a M”? , de la autoría de un afroamericano, que estuvo preso en una cárcel de Nueva York (no el libro de Valéria Piassa Polizzi).
En procura de penetrar a una zona preñada de delincuencia y narcos, agentes disfrazados, distribuían volantes de las «palabras de Dios», mientras que ¡conductores! (agentes), se dedican a corregir averías en sus vehículos… se narra en el libro.
Aspirantes saben que en el Nueva York grande, dos hermosas oficiales del precinto «Fuerte Apache», en el Bronx, aparecieron en una revista para caballeros al desnudo, sin dejar de ser policía.
Aretes, tatuajes, bigotes y dando la impresión de ser viciosos, es el diario accionar de los agentes de la ley, en Estados Unidos, mientras ¿qué se hace aquí?
Cuando recordamos la lectura del libro Por qué a Mí, entonces acuñamos lo dicho por el expresidente Fernández, de confiar más en un agente disfrazado de chinero, que un policía vestido de camuflaje, con chaleco y portando un arma.
Una simple pregunta, si un reconocido delincuente o narcotraficante, se siente acorralado e intenta desplazarse, y de repente visualiza en el lugar donde piensa esconderse, un despliegue de agentes de la ley ¿se meterá en la ratonera?
Un buen y disimulado equipo de comunicación, en poder de «un chinero», resulta más efectivo a la seguridad y la lucha contra la delincuencia, que varios uniformados en una esquina.
En la disco de “Villa Con” la pieza más busca visitaba a la vista de todos, también en Punta Cana un periódico lo captó, entonces ¿dónde estaba la seguridad?