En el Parque Enriquillo hay de todo, prostitutas y drogas
Por Augusto Álvarez
Los años se van sepultando, y luego de ausentarnos por un pequeño período, al regresar apreciamos los cambios.
Una sorpresiva llovizna, no obligó a refugiarnos en la glorieta del parque Enriquillo, y el entorno nos puso a pensar.
Y recordamos a un viejo trovador argentino que decía (refiriéndose a las mujeres), que las de “las cantinas son pa’ por si acaso”.
Sin embargo, en la complejidad de los que una vez fue un hermoso Parque Enriquillo ¿a cuál elegir para formar una familia?
Desde que entra al parque, ya está en un mercado muy especial, donde cualquier necesidad se resuelve, aunque la Policía esté al frente.
Tal y como dice el refrán, nunca falta un pelo en un sancocho, de ahí surge la posibilidad de encontrar una dama para formar una familia.
Se precisa, eso sí, de buena vista a la hora de una elección, pues cualquier pisada en falso, podría conducir a la cárcel o el hospital.
Entre una y otra que observe en el Parque Enriquillo, diferencie bien, pues nunca se sabe.
La prostitución y la drogas, los negocios sucios, el mercado sexual… todos en un mismo paquete en el Parque Enriquillo.
