Reflexiones: Yo también soy leproso
AYÚDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola amigos, ¿Qué tal? “Señor ten compasión de nosotros” fue el clamor de aquellos leprosos que con fe acudieron al Padre en busca de su sanación.
Sólo esa expresión bastó para que Jesús leyera en sus corazones la seguridad que ellos tenían de que Él los sanaría.
Hoy vivimos con nuestra lepra interior, inmersos en el pecado, sin poder dormir en paz porque la conciencia nos reclama que no estamos en consonancia con nuestra naturaleza humana, nacimos para ser santos, basta con que dirijamos nuestra mirada al Padre y reconociendo que estamos enfermos gritemos: Señor ten compasión de mí.
La fe es la única que nos garantiza nuestra relación con Dios, hoy puedes renunciar a todo lo que disminuya tu espiritualidad y te ate aquí en la tierra y recibirás el perdón y la sanación del Señor.
Ahora toca dar gracias, ser agradecido porque Dios permitió que este mensaje llegara hasta ti, porque te está hablando y tocando tu corazón, porque quiere transformar tu vida, sé agradecido y no pertenezcas al grupo de los que nunca dan gracias a Dios.
Víctor Martinez estará dando gracias a Dios hoy por haberte conocido, por saber que me estás escuchando, por reconocer que es el Padre quien se glorifica en mí, hoy quiero que entiendas que donde abunda el pecado sobreabunda la misericordia de Dios, Él nos ama como somos y nos ama tanto que no quiere dejarnos siendo así, vamos a abrirle nuestros corazones y permitirle que entre.
Hasta la próxima.
