¡Tan cogío, carajo! Gritó el León

Difícilmente, fuera de una campaña, alguien pueda escuchar a un dirigente político pronunciar una palabra con sabor a pueblo.
En ocasiones, quisiéramos realizar una brusca diferencia entre dos personas y un solo ser verdadero.
No recuerdo quien le conoció primero, quizás Carlos Dore ¿conexión telefónica Washington DC/NY? Posiblemente, el teórico Jimmy Sierra, en las aulas, mientras otros se conectaban con el León cuando el profesor Juan Bosch inició la desgarrapatización del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
Quizás nos aproximamos en la Padre Billini e Isabela Católica, quizás en alguna actividad morada, quién sabe.
Una luz señala, en campaña, a un Leonel Fernández, darse una vuelta por donde se siembre el lenguaje de pueblo, haciendo suyo su vocabulario «¡es cogío que tan, carajo!».
En la calentura, de 1973, a raíz de Caracoles, la denominada Navaja que partió al PRD, el profesor Juan Bosch, no admitía la mediocridad de algunos ni la arrogancia de otros.
Fue ahí donde el joven abogado empezó a crecer y crecer, como los espaguetis, rompiendo aspiraciones hasta… seguimos luego.