Vladimir Natera es considerado en Puerto Rico como sangriento criminal

SANTO DOMINGO, R.D.
Uno de los individuos, que fueron atrapados el domingo en República Dominicana y entregados este lunes por autoridades dominicanas a agentes federales estadounidenses, es un peligroso narco-criminal, con un largo historial delictivo, reclamado en Puerto Rico por narcotráfico y asesinatos.
Se trata de Vladimir Natera Abreu, quien fue apresado el domingo y repatriado a Puerto Rico por la Procuraduría General de la República (PGR) y la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).
Junto a Natera Abreu, también fue deportado Joset Jomar Rivera Verdejo. Ambos fueron llevados a la Base Aérea de San Isidro, desde donde fueron llevados a Puerto Rico en un avión militar.
Natera Abreu era considerado el jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Cantera, un grupo narcocriminal conocido en Puerto Rico como Las FARC o La Corporación FARC.
Además, era uno de los prófugos más buscados por el FBI.
En el 2019, Natera Abreu fue incluido en un pliego acusatorio de un Gran Jurado federal contra 75 individuos vinculados a la red denominada “Las FARC”.
La acusación contiene 28 cargos contra Natera Abreu, considerado como uno de los líderes de la pandilla, a la que le atribuyen crímenes violentos, así como trasiego de drogas.
La pandilla era investigada desde abril de 2015 por el FBI y varias agencias boricuas, por narcotráfico en el área de Barrio Obrero, El Guano, Playita, Calle William, Calle Once y Cantera, así como en los residenciales Villa Kennedy, Las Casas, El Mirador y Las Margaritas, además de otras áreas de Santurce.
La captura
Las autoridades allanaron el domingo la torre Gil Roma, del Ensanche Evaristo Morales, en el Distrito Nacional, donde residía el narcocriminal Natera Abreu.
Empero, ambos capos habían sido arrestados en el Residencial Jardines de Costa Verde, kilómetro 12 de la carretera Sánchez, en el Distrito Nacional.
La pandilla de Natera Abreu, se dijo, apresaba a sus enemigos y lo tiraban en una zona llena de caimanes, para que estos lo devoraran.