Primero de mayo atípico y atomizado
Augusto Álvarez
Los mismos cabezas de gremios de los últimos 30 años, andan activos en la prensa. Sin embargo, los sindicatos que dicen representar, duermen la resaca que produce la miseria.
El sindicalismo actual tiene como líderes o tribunos a empresarios del transporte y en lugar de grandes asambleas y marchas, el escenario de la lucha aterriza en llamadas al Palacio Nacional para llegar a acuerdos que quiebran la moral del trabajador.
Ninguna de las figuras que impulsaron la lucha de los trabajadores están presentes en la cotidianidad de la lucha por las reivindicaciones de los trabajadores.
De la época de Julio de Peña Valdez, Francisco Antonio Santos, Barbarin Mojica, es posible que haya sobrevivido Efraín Sánchez Soriano, aunque ¿aporta al sindicalismo real? ¡Nada!
Ya la atomización de las organizaciones de los trabajadores pasaron a formar parte de lo que la corrupción política liquidó.
Salvo algún pronunciamiento de determinado dirigente, este primero de mayo carece del esplendor de años atrás.
