REFLEXIONES: Con Covid aprendí

AYUDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola amigos, ¿qué tal? Pareciera que voy a entonarles la famosa canción contigo aprendí, “que puedo irme mañana mismo de este mundo, y contigo aprendí que yo nací el día en que te conocí”.
En verdad que con el Covid aprendí que nadie puede decir a mi no me da, que es una enfermedad que se caracteriza por el silencio, es sigilosa, violenta y peligrosa, y puedes irte mañana mismo de este mundo.
Aprendí que se combate desde un plano espiritual muy especial, independientemente de toda la asistencia médica que recibas, no debes resistirte a conectar con las fuerzas y las energías del universo, donde el Señor es el Rey.
Si no lo haces y pasas la enfermedad como un simple mortal, sin profundizar en tus adentros, sin reflexionar y sentirte cerca del tránsito de la vida a la vida, sin dar cambios fundamentales en el plano espiritual, no estás sano, te reincorporará al mundo contaminado y muy propenso a correr grandes riesgos en otras ocasiones.
Si la enfermedad te llevó a sentirte inmerso en niveles muy profundos de pensamientos, sensaciones, temores, reflexiones de vida, al extremo de fijar tu mirada en el Señor como tu único salvador, para convertirte en mejor persona, se llenó tu cometido.
Es así de sencillo, la pandemia tiene su razón de ser y Víctor Martínez te garantiza que tú, con Covid o sin Covid estás enmarcado dentro de un mundo que te ha tocado vivir y que quieras o no, está cambiando tu forma de ser y pensar.
Ojalá asumas tu nuevo estilo de vida con amor y sepas estrechar tus relaciones más que nunca con Dios.
Hasta la próxima.




