Si al presidente Abinader le preocupa… imagínese a las amas de casa
Por Claudia Fernández
En su discurso de primer año de gobierno, el presidente Luis Abinader externó su preocupación por el alza indiscriminada de precios de los productos de la canasta familiar y de otros no tan de la canasta ni tan familiares.
Si al mandatario le preocupa la situación, imagínese usted la que tendrán los cientos de miles de amas de casa que diariamente tienen que hacer malabares para poder presentar diariamente, ya no ‘’las tres calientes’’, que el dinero no da para tanto, pero por lo menos una, de manera decente.
El plato nacional, la ‘’bandera nacional, ha quedado en el recuerdo. Si se hace arroz es con huevos, fideos, sin «compaña».
Con la entrada de la peste porcina africana, y el sacrificio de miles de cerdos, los precios de las demás carnes se han disparado, el pollo, ni se diga desde 90 a 110 pesos, depende de donde se adquiera. La de res, incomparable. 150 una libra de número siete, cadera, 160 y 165. ¡Hasta el mondongo ha subido de precio! De 75 y 80 pesos limpios, hoy el precio ronda los 100 y 110 pesos.
¡Ah..! Una libra de res molida cuesta 178 pesos la libra.
Y si nos vamos por los aceites, arroces, granos, cereales y demás componentes de la canasta familiar, la situación es más que preocupante, se encuentra en estado de emergencia.
Apelar a medidas del Instituto Nacional de Estabilización de Precios (INESPRE), es llover sobre mojado. Desde su creación por ley, la 526 del 11 de diciembre de 1969, la entidad nunca ha sido operativa, solo ha servido para aliviar la carga económica de sus titulares y amigos.
Sí, es válida la preocupación presidencial, pero en lugar de preocuparse, ¿no debería estar reunido con su equipo económico buscando medidas para enfrentar la situación? No se le critica la preocupación, sí la inacción.
