AYUDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?
La vida nos rodea de situaciones en ocasiones, inconcebibles, nos suceden cosas que no nos explicamos, a las que no les encontramos razones, sin sentido, es cuando tenemos la tendencia a expresar: “Dios sabrá, si Él lo permite…”
Pero no siempre nos quedamos tan conformes y aunque soy de los que piensa que no debemos echar la culpa a Dios de nuestros fracasos, tragedias y catástrofes, sí estoy convencido de que Dios ve, lo que nosotros no vemos, nos alerta y nos da las pautas para evitarnos lágrimas, al final, todo obra para bien y siempre habrá un bien escondido detrás de cualquier situación, aunque nos parezca inexplicable.
Recuerdo cuando niño un accidente aéreo que le tocaba a mi padre que era uno de los pilotos de esa nave, le pidió a uno de sus compañeros que le hiciera el vuelo, le falló un motor al avión, se estrelló y murieron todos, lo recuerdo porque jamás había visto a un hombre llorar, como lo hizo él.
En ocasiones he tomado decisiones muy criticadas por quienes me rodean sintiéndome culpable, equivocado y con el tiempo he podido descubrir que fue lo mejor que me pudo pasar, de la misma manera ustedes tendrán miles de testimonios de situaciones en la que han expresado, “de lo que Dios me libró”.
Aquí entra en juego lo que llamamos insight, ese presentimiento, sexto sentido, esa capacidad de intuir, de ver, llevándonos a actuar, en ocasiones sin darnos cuenta, evitando dar un paso que no era el ideal, el correcto, el adecuado.
Vivo en comunicación permanente con Dios porque estoy seguro de que Él sigue mis pasos, de que Él ve lo que yo no veo y me evita situaciones que me podrían dañar, cuidándome, protegiéndome, iluminándome el camino a seguir, pero lo que me ha salvado en los últimos tiempos ha sido haber logrado la obediencia en el fiel cumplimiento de sus preceptos.
Hoy estoy donde estoy gracias al Padre quien me ha conducido por años revelándome sus planes para conmigo
Este mensaje ha llegado a todos ustedes gracias al apoyo recibido por nuestra hermana Diana Freites.
Hasta la próxima.
