Audio: ¿Cuándo fue la última vez que besaste a mamá?

 AYUDAME A SALVAR UNA VIDA 

Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?

Las últimas veces.

“Nadie nos avisa cuando será la última vez, no hay campana que avise ni voz que advierta que ésta será la última sonrisa que verás de esa persona, simplemente pasa y uno sigue caminando, pensando que la vida es eterna, cuando en realidad la vida es un suspiro disfrazado de rutina.

Hoy podría estar viviendo el ultimo café con tu madre, el ultimo abrazo de tu hijo, sin prisas, la última carcajada con ese amigo que siempre está, hasta que ya no está. Y no lo sabes, y no lo piensas, y no lo agradeces.

La costumbre nos anestesia, y sin darnos cuenta, vamos tachando instantes que jamás volverán, como si tuviéramos repuestos de alma o tiempo en algún cajón.

Hoy estás utilizando por última vez ciertas palabras, recorriendo por última vez ciertas calles, y mirando por última vez ciertos ojos, pero sigues aplazando besos, posponiendo abrazos, guardándote amos para una situación especial que tal vez nunca llegue.

Nos enseñaron a coleccionar cosas, pero no momentos, a trabajar por el futuro, pero no a detenernos en el ahora, a planear el viaje, pero sin saborear el trayecto, y es que nadie piensa que lo cotidiano es en realidad sagrado.

La vida no avisa, solo arranca páginas, y tú decides si las llena con presencia o con excusas, así que vive, vive como si cada paso fuera danza, como si cada palabra fuera testamento, como si cada mirada fuera despedida, y cada instante un regalo que alguien más no tuvo.

No esperes más a que la ausencia te recuerde que cada instante que pasa son las últimas veces de algo. No desperdicies más en la queja, la culpa o el vacío las últimas veces de amar a los que están y hacerles sentir el amor.

Tú estás vivo, no desperdicies ese milagro.”

Víctor Martínez quiso compartir este escrito de Fernando D’ Sandi, que me llegó días atrás, pienso que nos puede servir de reflexión en este mes de las madres, por eso la reflexión la titulé “cuando fue la última vez que besaste a mamá” o te tomaste un café con ella.

Dios bendiga todos nuestros hogares.

Este mensaje ha llegado a todos ustedes gracias al apoyo recibido por nuestra hermana Socorro Marmolejos.

Hasta la próxima.