Video: ¿Llega la autoridad del presidente a Cotuí?

Por Augusto Álvarez
El desmonte de árboles que realiza la empresa minera Barrick Gold y la creciente depredación en los alrededores de la presa de cola en Cotuí han generado una ola de preocupación y denuncia por parte de los campesinos de la zona.
Según los comunitarios, el verdadero poder en la provincia Sánchez Ramírez lo ejerce Barrick Gold. Aseguran que existen vínculos estrechos entre la empresa y las autoridades locales, cuya lealtad parece más cercana a los intereses mineros que al bienestar de la comunidad.
Es un secreto a voces que buena parte de los ingresos de los funcionarios provinciales proviene del “oro no contabilizado”, mediante acuerdos encubiertos como el alquiler de flotillas de camiones a la empresa.
La presencia militar en la zona, lejos de garantizar la seguridad ciudadana, actúa como un cuerpo de protección privada de la minera: resguardan las operaciones de extracción y reprimen cualquier intento de protesta por parte de los habitantes que se oponen al saqueo de los recursos naturales del Estado dominicano.
¿No constituye una violación de la soberanía nacional el despojo de nuestros recursos por parte de una empresa extranjera, sin un control estatal efectivo?
El entreguismo oficial se consolida, y este modelo de explotación minera solo anuncia lo que vendrá con la próxima fase: la extracción de las llamadas “tierras raras”.
Ante esta realidad, cabe preguntarse con seriedad: ¿quién ejerce realmente el poder en Cotuí -el presidente Luis Abinader o la Barrick Gold?