La masacre continúa en Gaza: Israel mató a 79 mientras esperaban comida

Gaza podría ser descrita como un mundo idealizado por la inteligencia artificial: densamente poblada, controlada, vigilada. Un experimento distópico donde la vida humana parece no tener valor.

Se estima que la población de Gaza, sometida a condiciones extremas, podría llegar a cifras similares a las de países como Brasil si se considerara el peso humano y emocional que carga cada vida en ese lugar.

Las cifras reales de personas que mueren de hambre en esta «trampa mortal» son imposibles de establecer con precisión. El colapso del sistema humanitario impide cualquier conteo fiable.

En Israel, los ataques se planifican como si fueran parte de una estrategia fría y escalonada, sin distinción de edad o género: niños, mujeres, ancianos. La consigna parece ser simplemente producir muertes.

Un estudio reciente estima que más de 53.000 palestinos han muerto como resultado de los bombardeos israelíes. Mientras tanto, en Estados Unidos, una encuesta revela que solo el 23 % de los ciudadanos apoya la política de Donald Trump respecto a Israel.