Guerra de plomo y hambre: Gaza, matadero de niños

ORIENTE MEDIO

Lo que ocurre en la Franja de Gaza es, sin exageración, una tragedia sin precedentes. Un genocidio a plena vista del mundo. Niños mueren por bombas, por balas, y por hambre.

Y mientras tanto, organismos como la ONU y la OEA siguen sin tomar medidas firmes contra Israel, ni imponer sanciones ejemplares que detengan esta barbarie.

Este sábado, al menos seis palestinos fueron asesinados por fuego israelí mientras esperaban ayuda humanitaria cerca de Wadi Gaza y en el eje Netzarim. Más tarde, otros 12 fueron abatidos en el cruce de Netzarim, elevando a 18 el número de muertos solo en esa jornada.

Desde el 2 de marzo de 2025, Israel ha cerrado todos los cruces hacia la Franja, impidiendo la entrada de alimentos, medicinas y combustible, lo que ha desencadenado una crisis de hambruna sin precedentes en el enclave sitiado.

La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (OOPS) advirtió que la desnutrición entre niños menores de cinco años se duplicó entre marzo y junio. La Organización Mundial de la Salud (OMS) confirmó que uno de cada cinco niños en la ciudad de Gaza sufre desnutrición severa, producto del bloqueo deliberado y los retrasos en la entrega de ayuda. Las consecuencias ya se traducen en cientos de vidas perdidas.

Mueren por hambre ante la mirada del mundo

Fuentes médicas del Complejo Médico Al-Shifa informaron este sábado la muerte del niño Atef Abu Khater, víctima directa del hambre y la desnutrición. Días antes, ocho personas más —incluidos varios menores— murieron por la misma causa. La cifra total asciende ya a 155 muertos por inanición, de los cuales al menos 90 son niños.

UNICEF: “Los niños de Gaza mueren a un ritmo sin precedentes”

El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) lo ha dejado claro: los niños en Gaza están muriendo como nunca antes. Ted Chaiban, director ejecutivo adjunto del organismo, afirmó durante una conferencia tras su reciente visita a la región que “los signos de profundo sufrimiento están en sus rostros”, y advirtió que «estamos en una encrucijada: las decisiones que se tomen hoy determinarán si decenas de miles de niños viven o mueren”.

Médico británico: “Gaza vive una barbarie medieval”

El cirujano británico Graeme Groom, quien participó en una misión médica voluntaria en Gaza, describió la situación como una «barbarie medieval». Relató escenas desgarradoras de niños que intentan dormir con el estómago lleno de agua y sal para calmar el hambre.

Denunció que la hambruna en Gaza «no es natural, sino fabricada», y que esta catástrofe afecta también al personal médico, debilitado por el hambre, sin recursos, y con el riesgo permanente de ser blanco de los bombardeos.

“La desnutrición ralentiza la recuperación de los heridos, multiplica los contagios y duplica las probabilidades de muerte”, explicó. “Lo que ocurre en Gaza es un crimen planificado”, sentenció.