Israel asesina a otras 64 personas y hiere a 278 en 24 horas

ORIENTE MEDIO

El Ministerio de Salud palestino en la Franja de Gaza informó este domingo que en las últimas 24 horas se registraron 64 nuevos asesinados y 278 heridos, elevando el balance total a 62,686 víctimas mortales y 157,951 heridos desde el inicio de la ofensiva israelí el 7 de octubre de 2023. La mayoría de las víctimas son mujeres y niños.

El comunicado oficial agregó que decenas de cuerpos continúan bajo los escombros, imposibles de rescatar debido a la falta de equipos de emergencia y al constante asedio militar.

Desde la violación del alto al fuego el pasado 18 de marzo, se contabilizan 10,842 asesinados y 45,910 heridos adicionales.

Además, el ministerio reportó que la crisis humanitaria sigue cobrándose vidas: en las últimas 24 horas murieron 19 personas y 123 resultaron heridas por causas vinculadas a la falta de alimentos, agua y medicinas. Con ello, el número de fallecidos por inanición y escasez asciende a 2,095, mientras que los heridos suman 15,431.

En total, 289 personas —entre ellas 115 niños— han muerto por desnutrición e inanición, reflejando el uso del hambre como arma de guerra.

Israel arrasa tierras en Al-Mughayyir

La ocupación israelí continúa, por cuarto día consecutivo, arrasando grandes extensiones de tierra palestina en la aldea de Al-Mughayyir, al noreste de Ramallah.

Fuentes locales confirmaron que excavadoras israelíes están pavimentando una nueva carretera colonial, destruyendo miles de dunams agrícolas, principalmente plantaciones de olivos. Desde el jueves pasado, las maquinarias trabajan entre las zonas de Rafid y Qalasoun, modificando el paisaje y ampliando la llamada carretera colonial Allon.

Durante la incursión, las fuerzas de ocupación impusieron un asedio militar sobre la aldea, atacaron viviendas y arrestaron a decenas de palestinos antes de retirarse al amanecer.

Guerra de exterminio y hambre

El portavoz de la presidencia palestina, Nabil Abu Rudeineh, denunció que Israel no busca detener la agresión, sino consolidar una política de genocidio y hambruna para forzar el desplazamiento del pueblo palestino y expandir los asentamientos ilegales en Cisjordania.

“El Estado ocupante desafía todos los llamamientos internacionales y persiste en sus crímenes, como lo ocurrido en Al-Mughayyir, donde se destruyeron tierras y bienes ciudadanos bajo la protección de colonos terroristas”, señaló Abu Rudeineh.

Advirtió que esta política israelí, tolerada por el silencio injustificado de Estados Unidos, amenaza con desatar un caos regional de grandes proporciones.

Finalmente, instó a la comunidad internacional y, en particular, a la ONU y a los líderes mundiales, a pasar de las declaraciones a la acción:

“Ha llegado el momento de obligar a Israel a detener su guerra de exterminio y hambruna, antes de que sea demasiado tarde.”