Los apagones y la inseguridad siguen colmando la paciencia de los dominicanos

Buenos días…

Los apagones han vuelto a agotar la paciencia del pueblo dominicano… y de paso, lo han encendido.

Llegan quejas de todas partes del país, incluyendo zonas turísticas: largos, frecuentes y abusivos apagones. En algunos lugares la gente ya está quemando gomas, apoyando protestas.

La situación es difícil, por más que el gobierno de Luis Abinader y el PRM pretenda exhibir “maravillas” en los medios. ¡Maravillas de caricatura! Porque en la práctica, la gente siente que se están burlando de la ciudadanía, como si aquí solo hubiera “indios”.

Pero no son solo los apagones… falta agua potable en sectores del Gran Santo Domingo y en provincias. ¡Una barbaridad!

La gente recuerda que en el 2020 pidió un cambio, pero dice que cayó en las peores manos: un presidente que habla mucho y no dice nada, que saca el cuerpo a problemas graves como la inseguridad. Hoy el temor colectivo a la delincuencia es real.

Y peor aún: no solo es miedo a los delincuentes, también a la Policía, porque por cualquier cosa te llenan los ojos de gas pimienta o te tiran un taser. Y no hay control.

Estamos feos en seguridad… escándalos en la DNCD, escándalos en el DNI… y el gobierno mirando para otro lado.

¿Resultado? La gente sigue desafiando hasta al presidente Donald Trump, cruzando por México para llegar a Estados Unidos. Y las yolas rumbo a Puerto Rico siguen llenas de desesperados, a pesar de la peligrosa travesía.

En el último viaje que zozobró murió un joven recién deportado, y su cuerpo aún no ha aparecido. El pasaje en yola ya subió -como todo en este país-, y hasta el transporte de “cositas raras” para Puerto Rico está más caro.

Los problemas del país no se resuelven hablando peplas en los medios, se resuelven enfrentándolos de verdad.

Si Abinader hubiera actuado contra los responsables de irregularidades en la Policía Nacional, hoy no estaríamos viendo a los mismos corruptos haciendo lo que quieren. Si el gobierno fuera transparente, no habría tantas denuncias de corrupción. Recibió cuatro auditorías llenas de irregularidades y no hizo nada. Por eso la podredumbre sigue creciendo.

Y que lo sepan las “bocinas”: tenemos esas cuatro auditorías en nuestras manos, con copias disponibles. Y otra, de ñapa.

El viernes, en las elecciones del SNTP, el Movimiento Marcelino Vega Mayoritario obtuvo una aplastante victoria sobre la otra corriente, que también lleva el nombre de un histórico malogrado periodista. Fue un voto de castigo para quienes se creen dueños y señores de la clase periodística.

Y a propósito: Olivo de León debería hablar menos disparate. Dijo que Wilson Guerrero ni figuraba en el padrón, y fue mentira. El colega llegó, votó en minutos, y punto. Para hablar mentiras y comer pescado, hay que tener mucho cuidado. Juzgue usted mismo:

Buen fin de semana! Y ojalá que la oposición despierte, porque el pueblo ya está cansado.

De ahí es que los independientes están cobrando fuerza… porque cuando los partidos se duermen, la gente busca nuevas voces que digan la verdad y defiendan sus intereses.