Trump está por ponerle el cascabel al gato… y aquí, a Paliza le están tirando hasta con drones
¡Cógelo, Picante! La Fuerza del Pueblo engrasa su maquinaria, pero en el PRM hay sectores que lucen nerviosos. Y el lío de los salarios en la PN tiene a los policías agresivos y a muchos sintiéndose estafados.

Buenos días…
Lo ocurrido recientemente en la Fiscalía de Santo Domingo Este volvió a prender las alarmas.
Dos delincuentes disfrazados de agentes de la DICRIM, caminando como Pedro por su casa en plena sede del Ministerio Público.
¡Así mismo! Por cosas como esa es que medio país está exigiendo que el presidente Luis Abinader prohíba de una vez y por todas, la venta libre de uniformes, insignias y ropa policial o militar. Ese relajo se volvió un peligro nacional.
La delincuencia anda suelta, y la gente lo siente en la piel. Hay temor en las calles, miedo hasta dentro de la casa y desconfianza hasta del que viene detrás.
En Santo Domingo Este, la cosa está peor, pues comunitarios tirando gritos por más vigilancia, cuadrantes que nadie ve, y barrios que parecen secuestrados por los atracadores. Y si así estamos ahora… imagine diciembre.
Presidente: el cambio en la Policía no puede esperar más. Hace falta un jefe policial con experiencia real, con manos limpias, con respeto interno. Esto que hay ahora es un desastre, y para colmo, ya ni siquiera es legal, según lo establece la propia ley policial, en su artículo 23, y lo recordamos por si acaso se le extravió a su Consultor Jurídico.
Ahí está el último episodio: el lío con los salarios de los policías. Descuentos absurdos, pagos incompletos, errores “inexplicables” y agentes indignados. Eso huele mal. Muy mal. A cocoricamo rancio. A gato metido en macuto.
Y mientras tanto, la ministra de Interior, aquella Faride que en la oposición era látigo, hoy parece convertida en un susurro. Silencio absoluto frente al caos. Y el silencio, ministra, también es complicidad.
Hay quejas por la «marcha» anunciada por la Fuerza del Pueblo para este domingo 30 de noviembre… Ya está engrasando su maquinaria. ¡Y están asustados!
Tranquilos, que según los organizadores, esa marcha no es proselitista… es, simplemente para reclamarle al gobierno que resuelva los problemas nacionales que ya están explotando en la calle, entre ellos:
- El alto costo de la comida y la canasta básica.
- Los precios abusivos de los combustibles.
- El colapso de los servicios públicos: apagones, agua y transporte.
- El desbordamiento de la inseguridad.
- La quiebra silenciosa de miles de pequeños negocios.
- La caída del poder adquisitivo de los salarios.
- La crisis hospitalaria y la falta de medicamentos.
- El abandono del campo y la producción nacional.
- El endeudamiento récord del país sin beneficios visibles.
Fiquito Vásquez, deja eso de “supuestas demandas sociales”. ¡Son demandas reales!
El pueblo se está muriendo de hambre y tú lo sabes. Ponte la pila y di la verdad. En el gobierno del PRM los precios de los alimentos se han duplicado y, en muchos casos, triplicado.
Fiquito… Aquí, todo está por las nubes… nada baja y todo sube.
Del otro lado, José Paliza, jefe del PRM, recibe fuego, incluso de su propia gente. Tienen razón quienes le exigen limpiar la casa. Deje la timidez política, ministro. En campaña, todo el mundo sabía quién era quién. Ahora no vengan con amnesia selectiva.
Y ya que estamos en eso… La pregunta que retumba: ¿Quién es el senador que supuestamente amenaza con “hablar” si lo tocan? ¿Quién es ese “empresario poderoso” del que tanto se murmura, que según rumores presiona, patalea y dice que si cae, no cae solo?
En diplomacia, también se sienten los movimientos. Dicen que a la embajadora Francis “Kiki” Campos no le tiembla el pulso. Que aquí el que tenga cola… que no se acerque al ventilador, porque hay vuelos que no son turísticos.
Y mientras algunos tiemblan, en las redes vuelve a sonar el nombre de un personaje del Cibao, uno que habló públicamente de aportes millonarios, de helicópteros prestados en campaña, de propiedades incautadas y de sentirse traicionado. Los rumores dicen que en Washington lo conocen bien. Si es cierto… ahí hay otra bomba de tiempo.
Presidente Abinader, la situación de la Policía Nacional es tan mala que, según oficiales del propio cuerpo, que ya no tienen personal suficiente para perseguir delincuentes: “Aquí parece que todos los que andan en motores están atracando”, dijo un coronel. Y otro confesó que muchos agentes están más enfocados en perseguir haitianos para extorsionarlos que en proteger ciudadanos.
¿Esa es la reforma policial? Porque si esa es, entonces la reforma salió peor que la enfermedad.
Y para rematar, en el panorama internacional, mientras Trump mueve fichas buscando frenar la guerra entre Ucrania y Rusia, en el Caribe la temperatura sube. Alguien tenía que ponerle el cascabel al gato del narcotráfico. Y si algo se sabe de Trump, es que no cree en paños tibios. Aquí, el que tenga miedo… que lo deje en la puerta.



