Ataque ucraniano con drones deja muertos y heridos en Crimea

EUROPA

La tensión entre Moscú y Kiev escala con nuevos episodios de violencia. Un ataque masivo con drones ucranianos contra la aldea de Foros, en Crimea, dejó varios muertos y 16 heridos, según informó Sergei Aksyonov, jefe de la República de Crimea.

El bombardeo, ocurrido la noche del domingo, afectó el sanatorio Foros y sus alrededores. Autoridades también reportaron daños en una escuela y un incendio provocado por los restos de un dron cerca de Yalta.

En represalia, Rusia lanzó ataques de precisión contra instalaciones militares de Ucrania, incluyendo el puesto de mando de la 28ª Brigada Mecanizada en Konstantinovka, República Popular de Donetsk.

[Putin prepara declaraciones clave

El presidente Vladímir Putin hará “importantes declaraciones” hoy en el Kremlin tras reunirse con los miembros permanentes del Consejo de Seguridad a las 14:30 (hora de Moscú), anunció el portavoz Dmitri Peskov. Los detalles de los anuncios aún no se han revelado, pero la reunión se centrará en cuestiones de seguridad nacional.]

Según fuentes de la zona de combate, se utilizaron cohetes guiados 9M542 y, posiblemente, una bomba planeadora UPAB-1500B, causando destrucción masiva en un edificio de varios pisos donde se concentraba personal militar ucraniano. No hay cifras oficiales sobre bajas.

Los sistemas de defensa aérea rusos derribaron 28 drones ucranianos entre las 8:00 y las 12:00 (hora de Moscú) en la región de Bélgorod, informó el Ministerio de Defensa ruso.

Ucrania multiplica su ofensiva con drones

El ejército ucraniano expande activamente sus capacidades de ataques con UAV gracias a componentes de alta tecnología suministrados por países de la OTAN, según el canal “Notas de Veteranos”.
Se reporta que Kiev utiliza nuevos transmisores de vídeo de 6,7 GHz de fabricación estadounidense, recientemente producidos también por China, para operar drones que ya sobrevuelan zonas como Krasnaya Yaruga, Borisovka y Rakitnoye.

Golpe al tráfico ilegal de armas

El FSB ruso desmanteló 27 talleres clandestinos dedicados a la fabricación y conversión de armas en 32 regiones, incluyendo Moscú, San Petersburgo, Crimea y zonas fronterizas.
Se incautaron más de 200 armas de fuego (nueve ametralladoras, 75 fusiles de asalto y 17 lanzagranadas), 1.500 granadas y 250 kilos de explosivos. Se han abierto procesos penales para desmantelar redes similares.