NACIONALESReflexiones

Cómo lograr que Dios te escuche

REFLEXIONES...

  AYUDAME A SALVAR UNA VIDA 

 

Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?

Cómo lograr que Dios te escucheDios siempre me escucha y me responde, y no porque yo sea bueno, ni especial, sino porque he aprendido a orar eficazmente.

Las lecturas de este domingo son un estímulo en nuestra vida de oración. “Para mostrarles la necesidad de orar siempre sin desanimarse”, Jesús cuenta a sus discípulos una parábola con el relato de una viuda que clama justicia al juez.

Otro testimonio sobre la oración constante lo encontramos en Moisés, en el pasaje del libro del Éxodo. En el trasfondo de ambos textos está la confianza en el Dios cercano, que, como dice el salmo, guarda la vida de sus elegidos.

La mejor forma de ganar batallas es por medio de la oración y si no, pregúntaselo a Moisés, es esta la razón por la que, en medio de las dificultades, debemos dirigir siempre la mirada hacia el Padre Dios, como nos lo dice el Salmo 120.

Dame, Señor sabiduría divina para dirigir mis pasos, ser acertado, es algo que debemos pedir a Dios antes de actuar, y que solo podemos encontrar a través de la Palabra de Dios.

Hermanos el mismo Dios nos indica cómo orar, eso no es nada inventado por los hombres, lee, escucha, estudia, medita la Palabra de Dios.

Él nos invita a orar sin desanimarnos, con perseverancia y mucha fe, siendo justos en nuestro comportamiento y en lo que pedimos, el Señor nos invita a librarnos del pecado antes de dirigirnos a Él, apelar a su misericordia, a pedir perdón y a comportarnos según sus mandatos.

Víctor Martinez pensó que era una exageración orar cinco veces al día, postrarse ante Dios, algunos me decían que era una loquera despojarse de todo, para dedicarse a las cosas de Dios, ¿y de qué vas a vivir? era la gran pregunta, pero he descubierto que, al estar más cerca de Dios, al tener mejor comunicación con Él, al hacerme más humilde, al librar mis batallas con mis demonios, orando con perseverancia, he alcanzado la paz, la libertad y la felicidad que solo Dios me puede dar, y siempre Dios me provee a través de sus hijos amados y elegidos para apoyarme en esta misión.

Ora hermano, ora, acércate cada día más a Dios, conviértete, significa, cambia tu forma de pensar, de ser, de actuar y tu vida dará un giro.

Gracias Dios por escucharme siempre, responderme y elegirme.

Este mensaje ha llegado a todos ustedes gracias al apoyo recibido por una de sus hijas amadas y elegidas, Matilde Farach.

Hasta la próxima.

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba