
Mensaje 4222
AYUDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola, amigos, ¿qué tal? Merhaba, arkadaslar, ¿nasilsiniz?
Hemos estado viendo algunas informaciones de las diferentes religiones y creencias las cuales quise enfocar según los criterios de ellos, no con el interés de emitir juicios, ni críticas sino de dar a conocer las razones por las que en el mundo son diversos los caminos que nos conducen a Dios.
Cuando empecé a decir los beneficios de los Musulmanes, alguien me escribió una nota acusatoria de que yo estaba promoviendo el Islam sin antes percatarse de que estaría conversando de todas las iglesias y religiones.
Musulmanes, adventistas, mormones, testigos de Jehová, sectas cristianas, budismo, entre otros, hoy nos toca reflexionar acerca de los beneficios de ser católico, claro, vistos desde el punto de vista de ellos.
En Catholic-link nos dice Sebastian Campos que, “Ser católicos es ser parte de una historia de amor que aún no termina de escribirse.”
Seguramente, dentro de tus actividades de apostolado, te han preguntado por qué eres católico. Te ha tocado defender a la Iglesia, incluso de otros católicos, que no están muy convencidos de estar en el lugar correcto.
Muchas veces ese esfuerzo por “convencer” y por dar argumentos para creer, se convierte en una pelea proselitista, en donde pareciera ser que el objetivo es hacer que más personas formen parte de nuestro grupo, y que, al mismo tiempo, dejen de irse a otros grupos, como si se tratara de una competencia de quien tiene más gente en sus reuniones.
Creo firmemente que el mejor argumento para defender tu fe es tu propia vida. Por eso es importante que recuerdes y tengas presente el por qué eres católico y lo que implica serlo. Vamos a resumir las razones que él nos expone de por qué ser católico:
- Porque somos la Iglesia fundada por Jesús:
Desde los días de Jesús hasta nuestros tiempos, existe una sucesión apostólica ininterrumpida. Es decir, los primeros discípulos formaron a sus propios discípulos y estos a otros de forma ininterrumpida hasta nuestros días. Por eso somos la Iglesia católica, apostólica, romana; porque heredamos la enseñanza de los apóstoles de forma directa.
- Porque son ridículos los requisitos para entrar al grupo:
Básicamente el perfil de ingreso y requisitos para entrar al grupo consisten en que no hay requisitos. En efecto, la ausencia de todo lo que teóricamente se espera de un creyente es justamente aquello que el Señor prefiere al momento de escoger a sus predilectos. Jesús, nos dejó claro quiénes eran sus favoritos y expresó decenas de veces con sus actos sobre qué personas tenía puesta su mirada, deteniéndose a hablarles, enseñarles, sanarlos y acompañarlos. Son los frágiles, los débiles, aquellos marginados de los grupos importantes, los que pecan una y otra vez, los confundidos, los que tienen fe, pero no forman parte del grupo de los sabios. Todos aquellos que aparentemente quedan fuera, justamente son los que cumplen con todo lo necesario para entrar al grupo.
- Por la gracia sobrenatural de los sacramentos:
Aunque Dios no necesita de ver, tocar y sentir; nosotros sí. Somos por naturaleza, seres “sacramentales”, es decir, necesitamos visibilizar aquello que es inmaterial; no porque nos falte fe, sino porque nos ayuda a comprender los misterios y a vivirlos. Los sacramentos son eso, una expresión visible a través del servicio de la Iglesia, de una gracia invisible que Dios nos quiere dar y que ha dejado como regalo para la humanidad. Por eso bautizamos, confirmamos; por eso nos acercamos al sacramento de la reconciliación, por eso recibimos su Cuerpo y su Sangre en la Eucaristía.Los Sacramentos infunden en quienes los viven, una gracia especial, que nos capacita, fortalece y anima a perseverar en nuestra vida cristiana.
- Porque es un lugar para los heridos, cansados y erráticos:
Un lugar donde podemos acoger a aquellos que el camino ha herido, aquellos que vienen sufrientes porque la vida los ha tratado con dureza, un lugar que sabe acompañar a quienes les toca experimentar la enfermedad, la pobreza y el abandono. No pienses solo en el clero y las cosas que ocurren dentro de la Misa. La Iglesia Católica es mucho más que Misas. Somos la organización mundial más grande en cuanto a ayuda a personas desfavorecidas; sean pobres, enfermos, perseguidos, refugiados, niños, jóvenes, adultos mayores.
- Porque creer en Jesús es una forma de creer humanizante:
Nuestro Dios se hizo hombre y de esta forma convirtió todo lo humano en una experiencia espiritual. No hay que mirar lejos para encontrar a Dios. Como dice San Pablo, sea que comamos, bebamos o cualquier cosa que hagamos, podemos hacerla para gloria de Dios (cf 1 Corintios 10, 31), por lo tanto, toda la experiencia humana, incluidas las alegrías y el dolor, son al mismo tiempo experiencias espirituales, que el mismo Dios ha vivido y que ha llenado de profundidad y significado.
- Porque experimentamos el perdón de Dios de forma real, no solo simbólica:
Gracias al sacramento de la reconciliación, tenemos la certeza de ser perdonados por Dios. Esto es único de la Iglesia católica y es un regalo del cual disfrutamos de forma gratuita. Jesús dejó a sus apóstoles el poder para perdonar los pecados. De ahí la importancia de la sucesión apostólica, pues ese atributo de los apóstoles no se ha perdido, sino que nos acompaña hasta el día de hoy, en donde recibimos la misericordia de Dios y literalmente nuestros pecados nos son perdonados.
- Porque es distinto enfrentar la vida comunitariamente:
No estás solo. Y es incomprensible que un cristiano experimente el abandono y la soledad si forma parte de una comunidad. Nuestra fe no es una fe individualista, no perseguimos solamente el ser mejores para superarnos a nosotros mismos o el ayudar a otros para satisfacer nuestras propias necesidades de reconocimiento. El ser “católicos” es un adjetivo, somos universales, es decir, todo el mundo es nuestro hermano.
- Porque nunca más estoy solo, todo el cielo está conmigo:
La vida no se acaba con la muerte física. Ángeles, santos, tus familiares y amigos difuntos, todos ellos son Iglesia también y los católicos hemos seguido las instrucciones de Dios al respecto y nos relacionamos con ellos. No hay momento del día ni lugar en el planeta en que estés sin la compañía espiritual de otros hermanos nuestros, de ángeles enviados por Dios y del mismo Dios Trinidad.
- Porque ser lo imperfecto y frágil del grupo es lo más hermoso:
Somos la “santa” Iglesia católica pero no por nuestros méritos, sino porque quien la fundó, Jesús, es Santo. Él, conociendo nuestra imperfección y fragilidad humana, nos amó y nos ama y nos escogió como su esposa, como el amor por quien entrega su vida.
No pretendemos ser una organización perfectamente peinada y de ropa siempre impecablemente planchada, mas, nos vemos a nosotros mismos como una obra hecha con amor por Dios, que acoge esta imperfección humana para amarla.
10. Porque la experiencia de miles de años nos ayuda a comprender mejor la voluntad de Dios:
Muchas veces se critica a la Iglesia de rígida, anacrónica y que eso la convierte en una institución que no está acorde a los cambios sociales. No obstante, la Iglesia si va evolucionando, va discerniendo los signos de los tiempos, va volviendo a revisar las Escrituras y las enseñanzas de Jesús, de los profetas y de los Santos. Es por eso por lo que podemos leer enseñanzas de santos y otros personajes reconocidos de la historia de la Iglesia, que con el pasar del tiempo se han ido reinterpretando. Esto no aplica para los Dogmas, pero sí para la vida de los cristianos y la práctica de la fe.
Oremos hoy por los católicos para que aprendan a defender su fe y a ser ejemplos de verdaderos cristianos en el mundo, Dios los bendiga a todos.
Si esta reflexión te ha gustado o ha tocado tu corazón no dejes de hacernos tu aporte para sostener nuestra misión de llevar la Palabra de Dios por el mundo entero.
Este mensaje ha llegado a todos ustedes gracias al apoyo recibido por nuestra hermana Yanilsa González.
Hasta la próxima.



