La permisividad y la justicia retrasaron el “cara a cara” del exdirector de SeNaSa

Por Augusto Álvarez

¿Fue conveniente para el doctor Santiago Hazim, exdirector de SeNaSa, “decir presente” en una boda y prolongar así su encuentro frente a frente con la justicia?

Aunque la Procuraduría guarda en sus archivos casos importantes, una instancia superior —ya usted sabe de cuál hablamos— impartió instrucciones para que la principal figura implicada en estafar al Estado, aun con su habitación lista en Najayo, pudiera disfrutar de la brisita navideña como si nada.

Hasta ahora, van 9 implicados en el saqueo al Estado. Sin embargo, faltan piezas clave del engranaje corruptivo de la aseguradora pública que maneja la salud de casi toda la población afiliada.

¿Qué tan largas tenían las uñas los funcionarios que participaron en la corrupción de SeNaSa?

Los fiscales hablan de unos 15 mil millones de pesos que los corruptos se habrían llevado entre las uñas. Una barbaridad.

Cuando la Fuerza del Pueblo denunció la corrupción millonaria en SeNaSa, la primera reacción del oficialismo, encabezado por el propio presidente, fue negarlo todo. Otros funcionarios, como perico, repitieron lo mismo, quizá temerosos de perder sus puestos.
Pero, dígame usted: ¿qué ganan los subalternos mintiéndole al presidente?

Solo cuando el partido de Leonel Fernández reiteró la denuncia, el oficialismo empezó a admitir lo que antes negaba.

Tenemos informaciones de que faltan nombres importantes, piezas del engranaje que sí tomaban decisiones en SeNaSa. Y ahora, en el festival de voces en la Procuraduría, la pregunta es inevitable: ¿Quién acusa a quién?

En San Pedro de Macorís, fiscales enviados desde la capital tocaron algunas puertas. ¿Hubo detenciones? Todavía no lo sabemos.

Lo cierto es que figuras importantes de la cúpula de SeNaSa jamás fueron tomadas en cuenta en la investigación inicial, y gracias a esa exclusión hoy permanecen al margen de toda sospecha… al menos, por ahora.