RD sigue pasos de Haití en materia de seguridad y corrupción

Buenos días…

Nuestro país, en ciertos aspectos, cada día se asemeja más a Haití.

En Haití la inseguridad es insoportable. Nosotros vamos por el mismo camino

En Haití el hambre es espantosa. Nosotros vamos por esa misma ruta.

En Haití entran grandes cantidades de drogas, principalmente desde Sudamérica, por todas sus costas.  Nosotros la recibimos por toneladas.

En Haití viajan frecuentemente miles de ilegales hacia República Dominicana y otros destinos. Nosotros viajamos en yolas, clandestinamente, hacia Puerto Rico, y con documentos falsos a otros países.

En Haití lanzan y queman, con una bomba molotov, un vehículo blindado de la policía. Nosotros lanzamos botellas incendiarias a una grúa de la DIGESETT.

En Haití las bandas están aterrorizando a la población, y la policía le tiene miedo. Aquí, los narcotraficantes y los delincuentes están azotando a la población, y muchos malhechores son protegidos por la Policía.

En Haití ya ni se habla de corrupción, porque casi todos son corruptos. Aquí vamos por el mismo camino, y los nuevos corruptos son protegidos, y algunos premiados.

Por esas y otras cositas, haitianos y dominicanos no deben pelearse, ya que en Haití, a las autoridades se les importa un carajo que los funcionarios desvalijen el Estado, y aquí seguimos por la misma ruta, el presidente Luis Abinader se hace el que no ve ni oye ni entiende.

Y mientras tanto, sigue la violencia por dondequiera y no se detiene la criminalidad, con la diferencia de que en Haití dicen lo que pasa, y aquí, ocultan las estadísticas.

En Haití, tres funcionarios intentaron saquear un banco del Estado, y les partieron las alas.  Aquí eso ocurre, pero no se ve. Un funcionario hace maravillas en sus fincas, construye más obras que el mismo gobierno, y el presidente Abinader lo apoya.

En Haití, a cualquier pelafustán, incluyendo políticos, lo linchan por sus acciones. Aquí, a ciudadanos en las cárceles. Y nada pasa, pues dicen que se suicidó, y no hay quien investigue.

En Haití, cuando un alto mando mete las manos, y se lleva lo que no es de él, lo mandan para su casa. Aquí, son premiados y protegidos por el gobierno. Sobran los ejemplos.

 Un grupo de elementos lanzó botellas incendiarias a una grúa de la DIGESETT, eso fue un acto criminal, aunque provocado por los abusos de los agentes de tránsito, que retienen motocicletas con todos sus documentos.

Al director del INTRANT, Milton Morrison, hay que decirle que el caos del tránsito es por la incapacidad de las autoridades competentes, porque están en todo, menos en lo que tienen que estar. Son unos vagos. Trabajan mucho, pero por los medios.

Los accidentes de tránsito, en nuestro país, se han incrementado de manera alarmante, pero ocultan todas las estadísticas. En materia de seguridad no se dice la verdad de lo que realmente ocurre, lo que es sumamente alarmante. 

Dos jóvenes fueron asesinados a tiros la madrugada del jueves, en un incidente ocurrido en el sector Buenos Aires de Herrera, Santo Domingo Oeste. ¿Y entonces…?

El Tribunal Constitucional acogió un recurso que busca anular la disposición transitoria, en la Constitución, que impide al presidente Luis Abinader postularse en el año 2028, para tratar de repetir a un tercer mandato.

Abinader está en reelección. Eso sería difícil, pero todavía el país puede seguir cogiendo prestados, los patrocinadores de las campañas pasadas siguen activos y la gente se vende por chelitos.

 La directora de la Junta Municipal de San Luis, Wendy Cepeda, debe actuar de manera responsable e identificar a los opositores, que ella dice, le pegaron fuego al vertedero de San Luis. Ella dice que lo tiene identificado. Qué diga cuáles son. Y si no lo hace, nosotros diremos lo que pensamos de ella.