Ministerio Público falla otra vez al no proteger abogada
Por Augusto Álvarez
El ministerio público es responsable parcial de la segunda muerte de la hoy difunta, doctora Anibel González.
La primera muerte ocurrió cuando ella (agujereada a cuchilladas) fue ayudada a escapar por la ciencia médica de la frontera del más allá y el reino de la impunidad.
El mecanismo de la impunidad judicial es un clásico, el fiscal o juez titular se ausenta, otro sube y empaña de excremento a la justicia.
¿Fue casual la actuación de la fiscal Margarita Hernández, quien reemplazó a su colega Luz Aurora?
Al margen de cualquier respuesta “técnica», está la libertad del empresario Yasmil Oscar Fernández, un carnicero que no debe cargar solo con la muerte de la joven profesional Anibel González, sino quienes lo excarcelaron deben tener responsabilidad en dicho asesinato.
De sangrando y sosteniendo en las escaleras del hospital el fruto de su vientre, así fue como el doctor Hipólito Medina describió a la asesinada Anibel González.
¿Hasta dónde seguirá reinando la impunidad? ¿Habría sometido el ministerio público al asesino a algún tipo de evaluación médica creíble? ¿Ahora cuál será el futuro de la inocencia que la joven alumbró?
La justicia y el ministerio público de la provincia de San Pedro de Macorís deben ser revisada, pues ahí están ocurriendo cosas raras. Por ejemplo, el Juez de la Pena pone en libertad a un condenado, sin que la víctima o representantes se enteren.
Son muchos los casos de mujeres que han sido asesinadas por falta de protección del Ministerio Públicos y eso ha sido denunciado por familiares de las propias víctimas, mientras el procurador Jean Alain Rodríguez vive cascareando que en el país se protege a las mujeres.
Ahí, también, ha fallado.
