Reflexiones: La felicidad
AYÚDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola, amigos, ¿qué tal? Borja Vilaseca me invitó a la reflexión de hoy, ya que encontrar la felicidad es algo que a todos en algún momento nos ha preocupado, debemos crecer, madurar y evolucionar como seres humanos, para aprender a ser felices por nosotros mismos, de manera que sepamos cómo amar a los demás y a la vida tal como son.
“La felicidad no nos la va a dar el dinero, ni los éxitos, ni estatus, ni los reconocimientos, el propósito de la vida es más trascendente, es un continuo proceso de aprendizaje, es aprender a ser felices por nosotros mismos, es decir, a sentirnos realmente a gusto sin necesidad de ninguna persona, estímulo, cosa o circunstancia externa. Más que nada porque ¿de qué nos sirve llevar una vida de éxito y de abundancia material si nos sentimos vacíos e insatisfechos por dentro?”
Víctor Martinez te exhorta a no confundir la felicidad con el placer y la satisfacción que nos proporciona el consumo de bienes materiales, ni con la euforia de conseguir lo que deseamos. La verdadera felicidad no está relacionada con lo que hacemos ni con lo que poseemos, sino con la ausencia de lucha, conflicto y sufrimiento internos. Por eso se dice que somos felices cuando nos aceptamos tal como somos y –desde un punto de vista emocional– sentimos que no nos falta de nada.
Al final descubrimos que sólo Dios basta, dichosos quienes lo descubren desde el principio.
Hasta la próxima.
