REFLEXIONES: Sacramentos
AYÚDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola, amigos, ¿qué tal? Los sacramentos son signos sensibles y eficaces de la gracia de Dios, fundados por Cristo y mediante los cuales se otorga la vida divina; es decir, ofrecen al creyente el ser hijos de Dios.
Los sacramentos se administran en distintos momentos de la vida del cristiano y simbólicamente la abarcan por entero, desde el bautismo hasta la unción de los enfermos.
La mayoría de los sacramentos solo pueden ser administrados por un sacerdote o diácono. El bautismo, en ocasiones excepcionales, puede ser administrado por cualquier seglar, o incluso no cristiano, que tenga la intención de hacer con el signo lo que la Iglesia hace. Además, en el sacramento del matrimonio los ministros son los mismos contrayentes.
Recibir los sacramentos es recibir la gracia divina, la efusión del Espíritu Santo, es fortalecer la fe y recibir los dones que Dios nos da.
Bautizarnos, confesarnos, recibir la Eucaristía, confirmarnos, ungirnos, son verdaderos signos de amor y lealtad al Padre, así como cuando celebramos el matrimonio o la orden sacerdotal.
Víctor Martinez te exhorta a sellar tu amistad con Dios a través de los sacramentos.
Hasta la próxima.
