¡Por qué sorprenderse? Así es nuestra ¡Justicia!

Por Augusto Álvarez
La ¿ex fiscal? de Villa Vásquez acusada de sembrar drogas en una barbería, nunca estuvo en prisión.
Luego de ser encontrada culpable, al igual que los agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), incluyendo un oficial superior, y enviada a Rafey Mujeres, Carmen Lisset Nuñez, permaneció en el cuartel policial de Villa Vázquez «hasta que le arreglaran su asunto».
Circuló la versión, que mientras se evacuaba la variación de la medida de coerción a domiciliaria, la abogada Lisset Nuñez, la propia DNCD habría pagado la ridícula garantía económica de 40 mil pesos por cada agente que participó en la siembra.
Aunque corre el rumor de que la ¿ex fiscal¿ habría servido en el cuerpo de orden público, se desconoce, a quién sirve.
El crimen que se intentó en la barbería de sentenciar a varios trabajadores a una muerte civil, no habrá forma de justificarlo.
Si pagando 40 mil pesos de fianza, que al final son unos pesitos, y lograron su excarcelación, se supone que muchos apresados con un simple tabaco de hierba, entonces irían a su casa muy pronto, incluyendo palomos encerrados por oler cemento.
Si el juez de la Instrucción dispuso que la ¿ex fiscal? fuera enviada a Rafey Mujeres, ¿quién varió la disposición?
Aunque se ha dicho que el Procurador apelará la disposición que cambia la medida de coerción por prisión domiciliaria a la ¿ex fiscal?, como siempre, nos quedaremos esperado.