Enfrentó raptores y lo despojaron de su arma

Una banda de pillos se presentó a una vivienda de la zona oriental, donde trató de llevarse los cables del tendido eléctrico.
Mientras maniobraban, el propietario de la misma sorprendió a los delincuentes, y con una escopeta legal, realizó varios disparos.
Quienes trataron de robar se defendieron disparando las armas que portaban, emprendieron la huida, pero fueron atrapados.
Inmediatamente los presuntos bandoleros fueron conducidos a la justicia, donde se les otorgó una garantía económica.
Sin embargo, al propietario del hogar que asustó a los presuntos malhechores, se le quitó su arma legal, así como un vehículo de su propiedad, se explicó.
Al parecer los presuntos bandoleros fueron por cables y salieron corriendo por las balas, gracias a estar preparado.
En tiempos pasados, un ex general también repelió un intento de robo, y portando un arma de guerra, persiguió a los forajidos, y no fue despojado de su arma.
Una persona de trabajo, portadora de un arma legal, es un riesgo doble, o muere defendiéndose o debe enfrentar la justicia si sobrevive combatiendo a delincuentes.