REFLEXIONES: Manual para educar a nuestros hijos
AYÚDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola, amigos, ¿qué tal? Existen actitudes por parte de los padres que muchas veces sin percatarse podrían estar dañando de manera significativa a sus hijos:
Cuando alguien llama y el padre dice: “Dile que no estoy aquí”. Cuando de una manera supuestamente astuta quiere mostrarle sus destrezas metiéndose en vía contraria, ahora que no hay un AMET. Cuando se pasa un semáforo en rojo porque nadie lo está viendo. Cuando le devuelven dinero de más y se queda callado. Cuando llega a la Iglesia tarde estar menos tiempo.
Cuando el padre es el culpable de llegar tarde al colegio. Cuando evade hacer la fila y se roba una posición. Cuando usa el tráfico de influencia mostrándole a su hijo la importancia de las relaciones. Cuando los padres le permiten copiar la tarea o plagiar los trabajos.
Niños y jóvenes que ven a sus padres gritándose como dos desaforados, padres alcohólicos y todo lo que esto conlleva, madres que le dan poco tiempo porque el trabajo no se lo permite. Padres separados que no son capaces de llevarse con armonía y sin rencores y escenifican conflictos frente a sus hijos.
Víctor Martínez piensa que en la gran mayoría de las veces nuestros muchachos no andan mal, sino sus padres, ellos son el fruto de lo que hemos sembrado, del ejemplo que le hemos dado, de la educación que le hemos impartido.
¿Cuántos de nosotros estamos educando en la fe y mostramos a nuestros hijos el verdadero sentido de la Navidad?
Hasta la próxima.
