Nancy Pelosi, una espina en la garganta de Trump
Las leyes en el país que tenemos de guía son tan especiales, que un juez, ubicado en un apartado lugar de la Unión, frena una decisión presidencial.
Los ejemplos sobran, sin embargo, ahora estamos observando, lo que es un verdadero liderazgo en Estado Unidos.
El liderazgo y el poder de un legislador de Estados Unidos, adquiere dimensiones especiales, gracias al chaleco que repele cualquier intentona corruptiva proveniente de alguna esfera del poder.
Bordeando los 78 años de edad, y tras heredar de su padre la misma ruta de Demócrata, Nancy Pelosi, ha llevado el brillo a un Congreso infecto de odio a la minoría y lo que considera ineptitudes de la gestión del presidente Donald Trump y acuerdos subterráneos con otras naciones.
No escapa a la líder de los demócratas, en la Cámara de Representantes, el peso de la mayoría republicana en el Senado, de ahí la visión de Nancy Pelosi de ¡aguantar! la tramitación de los resultados, al Senado.
Nancy Patricia Pelosi es una espina en la garganta de la administración de Donald Trump, que de haber tenido una infracción de tránsito, ya habría salido a flote.
Nuestra capacidad de ingenuidad cedería, cuando un juez tenga agallas, para anular o modificar, una disposición de algún ministro o director, pues en cuanto a enfrentar al jefe de la administración pública… ni loco que esté.
En el mismo momento en que un presidente de una cámara legislativa decida ponerse el traje de la honestidad y desafiar a las alturas, entonces se iniciará el proceso matrimoniarse contra la corrupción.
