Préstamos, senadores y más préstamos

Por Augusto Álvarez
Nuevos préstamos que comprometen al Estado, podrían tener vigencia en el papel, pero sin poder en el tiempo.
En medio de la actual pandemia ¿cómo se podrá trabajar en la construcción y/o ampliación del Metro, y si el mismo reviste más prioridad que la salud del pueblo?
La obtención de un préstamo de 50 millones, ahora para ampliar las líneas del metro, constituye un absurdo hasta pensar en que ese dinero será utilizado en ese sistema de transporte, no es que esté mal, pero ¿por qué ahora?
Es posible que quien resulte vencedor en las elecciones de julio, no logre ver más allá de la primera parte de la ampliación de los trabajos del metro, si no es que se adentra en nuevos estudios del mismo.
Durante una de las administraciones del doctor Joaquín Balaguer, la dirección de Tránsito Terrestre, de Obras Públicas, le propuso al mandatario la construcción de una especie de ¡metro anillo! en el Distrito Nacional ¿qué sucedió?
Muy sencillo, el mandatario olfateó exagerado el costo, y desestimó el proyecto ¿instruiría en su percepción algún elemento corruptivo? Se recuerda que el gobernante declaró que la corrupción se detenía en la puerta de su despacho, sin embargo, invisibles intersticios permitieron se filtraran sino al despacho sí a su administración.
¿Dónde se detiene la corrupción denunciada por un embajador Norteamericano y murmurado por políticos y periodistas? El presidente Danilo Medida, emplazó al diplomático a probar la corrupción, de ahí se iniciaron los problemas de Odebrecht y Punta Catalina, siendo ponderado los millones para el metro, a la luz de tal realidad.
La lupa del nuevo Senado, del emergente Congreso ¿dará luz verde a todas las acciones del legislador saliente?