REFLEXIONES: ¿Quieres sembrar o cosechar?
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Hola, amigos, ¿qué tal? El evangelio de san Mateo nos dice hoy que: “Jesús les habló mucho rato en parábolas: «Salió el sembrador a sembrar. Al sembrar, un poco cayó al borde del camino; vinieron los pájaros y se lo comieron. Otro poco cayó en terreno pedregoso, donde apenas tenía tierra, y, como la tierra no era profunda, brotó en seguida; pero, en cuanto salió el sol, se abrasó y por falta de raíz se secó. Otro poco cayó entre zarzas, que crecieron y lo ahogaron. El resto cayó en tierra buena y dio grano: unos, ciento; otros, sesenta; otros, treinta. El que tenga oídos que oiga.» Palabra del Señor
Nos invita esta parábola a revisar como es el terreno interior de cada uno de nosotros y como acogemos la Palabra de Dios en nuestros corazones.
¿Acaso nos llega y se esfuma sin ponerle atención, o estamos tan áridos por las decepciones de la vida que la presencia de Dios brota de nuestro interior quedando vacíos y secándonos por la falta de amor? Creo que hay quienes se dejan ahogar, influenciar y toman el camino equivocado, sin importarles alejarse de Dios.
Por suerte que algunos tienen su terreno interior bien abonado y al recibir la Palabra la meditan en sus corazones y le dan entrada al Padre, unos en mayor grado que otros.
Víctor Martínez piensa que quien tiene terreno fértil, se debe dedicar a sembrar junto al Señor predicando la Palabra, aunque sea con el ejemplo.
Hasta la próxima.
