Reclaman indagar abusos y torturas en gestión de Bautista Almonte

SANTO DOMINGO, R.D.
Durante la jefatura que encabezó el mayor general, hoy en retiro “honroso”, Ney Aldrin Bautista Almonte, ocurrieron incidentes horribles, que deterioraron la imagen de la Policía Nacional.
Fue una gestión, donde el accionar de la delincuencia estuvo activo todo el tiempo, los escándalos estuvieron a la orden del día y la sangre no dejó de correr, incluyendo la de decenas de policías que fueron víctimas de la delincuencia.
El nuevo director de la Policía, mayor general Edward Sánchez González, debe solicitar una auditoría para establecer cómo se manejaron los recursos de la institución en los últimos tres años, donde se dice, hubo importantes irregularidades en la distribución de combustibles y en los fondos destinados a la Academia de Hatillo, San Cristóbal.
Mientras que la procuradora general de la República, doctora Miriam Germán Brito, debe disponer una investigación sobre grandes inversiones de oficiales, cercanos colaboradores del mayor general retirado Bautista Almonte, en diferentes lugares, incluyendo en Pino Alto, Jarabacoa.
Oficiales activos de la Policía esperan que la Procuraduría indague la forma en que el pasado jefe policial “repartió” los apartamentos construidos por la institución en el municipio Santo Domingo Este, que se dicen, fueron entregados a sus colaboradores.
Abusos policiales
Durante la gestión de Bautista Almonte, los abusos policiales estuvieron a la orden del día.
Uno de los principales actos de barbaries ocurridos en la pasada gestión policial, coordinado junto al pasado procurador Jean Alain Rodríguez, buscaba implicar al hoy presidente Luis Abinader en acciones criminales, que según ellos, provocaron la suspensión de las elecciones del 16 de febrero, lo que posteriormente fue rechazado, mediante una investigación, por la OEA.
Empero, ya los protagonistas de ese macabro plan habían incurrido en acciones criminales, al torturar y vulnerarle todos los derechos del entonces coronel Ramón Antonio Guzmán Peralta, hoy general de brigada, así como de un técnico telefónico, que recibió una paliza de los investigadores, en presencia de varios fiscales.
Operativo en Los Mina
Otro de los grandes escándalos ocurridos durante la jefatura de Bautista Almonte fue el operativo, sin autorización, realizado por un grupo de oficiales en el sector El Maleconcito, de Los Mina Norte, donde cayó abatido un supuesto asaltante a una sucursal del Banco Popular y al menos tres oficiales resultaron heridos, uno de los cuales murió horas después.
Ese operativo fue hecho a espalda de la fiscalía de Santo Domingo Este, no se le comunicó al director regional de la Policía y el botín recuperado habría desaparecido en medio del operativo.
Otro mayúsculo escándalo ocurrió cuando un vigilante, cabecilla de una banda que asaltó un banco y cargó con más de 5 millones de pesos, se suicidó dentro de un vehículo de la Policía, en la sede principal de Santiago, a pesar de de estar esposado y llevar más de una hora detenido.
Caso del abogado
El país se estremeció, igualmente, cuando un profesional del derecho fue herido, masacrado, detenido y esposado, en Santo Domingo Este, y murió estando prisionero en poder de la Policía Nacional.
Mientras era arrastrado por los agentes policiales, el licenciado Argenis Martínez, llegó a gritar “¡me van a matar, óiganlo bien!”. Y ciertamente, murió.
Otros escándalos
La Policía mata un hombre, en el sector capitalino de Los Girasoles, delante de sus hijos y la misma víctima gravó en vivo el operativo policial en su contra.
En Santiago, otro escándalo estremece a la Policía, cuando otro joven fue acribillado a balazos por miembros de la institución, delante de varios menores, una de las cuales resultó herida por uno de los disparos realizados por los agentes actuantes.
Algo que nunca había ocurrido en el país, en las últimas, se produjo en la escandalosa jefatura de Bautista Almonte, cuando haitianos asaltan cuartel de la Policía en Azua, hirieron agente y se llevaron escopeta.
Ascensos escandalosos
Los escándalos sobre ascensos estuvieron también a la orden del día, y en cada uno, las quejas fueron al por mayor y detalle
El país se encolerizó, cuando el segundo teniente Bernardo Alberto Paredes, se suicido, en protesta porque a pesar de tener siete años en el rango, lo sacaron de la lista.
La otra cara. En esos mismos ascensos, una mujer policial, Maciel de los Santos, fue llevada de cabo a segundo teniente, mientras una sargento, Ildian Montás Montero, se quejaba de no haber sido ascendida, a pesar de tener casi cinco años en el rango, dos profesiones y varios diplomados.
En la Policía hay numerosos oficiales que llevan más de ocho años en el mismo rango, mientras Bautista Almonte se ufanaba en decir, que todos los agentes, con más de cinco años, habían sido ascendidos. Una vulgar mentira.
Los abusos, ejecuciones, escándalos e inseguridad deben ser enfrentados por la actual dirección policial a fin de levantar la imagen de esa institución y que la misma reacciones como la ciudadanía espera.
Danilo lo mantuvo ilegal
A pesar de la inseguridad, los crímenes y los escándalos en la Policía, Bautista Almonte permaneció casi tres años, como jefe de una Policía. El presidente Danilo Medina lo mantuvo en el cargo violando la Ley 590-17, que él mismo promovió y promulgó.