ACTUALIDADNACIONALESSALUD

El Covid-19 disfruta de las playas

Por Augusto Álvarez

La diversión podría esperar, la expansión del coronavirus debe ser detenida, ampliando las restricciones, quedándonos en casa.

La pasada semana, el desbordamiento de personas, sin mascarilla y sin evitar el distanciamiento, en una playa, más que el derecho a la diversión, constituyó un desafío a la muerte.

Quienes asistieron a esa playa, no aman la vida, desafiaron al coronavirus, y también a las regulaciones impuestas por las autoridades.

Regresaron al hogar felices e ignorando si el estado de salud andaba bien, si lucía estar bien, y quizás lo estaba.

Las autoridades, en la creencia de que las aguas marinas eliminan el letal virus, ignoraron el regreso de los bañistas, pues si no se dispone el cierre de las playas, amén, que muera el que esté cansado de la vida, razonaban.

Ninguna explicación de las autoridades podrá argüirse para justificar que esa fábrica de contagio, que son las playas, continúe abiertas.

Publicaciones relacionadas

Botón volver arriba