REFLEXIONES: La llegada de un hermano
Hola amigos, ¿qué tal? Pienso que quienes han tenido la dicha de nacer primero en el seno de una familia y ver llegar a su primer hermano o hermana, deben recordar la gran felicidad que nos ocasionó recibir a un nuevo vástago, a pesar de que en muchas ocasiones nos viene a quitar el lugar privilegiado que ya teníamos.
La llegada de un nuevo miembro de la familia siempre viene a traernos nuevas emociones, hermanos con quienes crecemos, si no lo perdemos, a quienes queremos de manera entrañable, y por quien nos peleamos, si es necesario.
Tristeza causa el desprendimiento afectivo de algunos que por diversas razones se pelean, se alejan y terminan siendo como enemigos. La mayor cuota de sufrimiento la tienen los padres quienes los criaron con tanto amor, y si se han ido estoy seguro que desde sus tumbas no descansan en paz viendo a sus hijos desunidos.
Es esta una relación muy valiosa que trae muchas bendiciones a la familia, nos señala el Señor en Romanos 14, que no debemos juzgar, ni menospreciar a nuestro hermano. Sin importar la edad que tengamos o las circunstancias que nos ha tocado vivir debemos evitar los celos, envidias, chismes, malos deseos para con quienes crecimos y vivimos juntos, nuestros hermanos.
Víctor Martínez da gracias al Padre hoy, por su hermana Mayra, aún recuerdo la alegría y el regocijo que sentimos al verla llegar un día como hoy, felicidades hermana, que Dios te bendiga y te de mucha salud.
Hasta la próxima.
