REFLEXIONES: Cómo estar felices y saludables
AYUDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola amigos, ¿qué tal? Para ser felices y estar saludables, debemos cuidar nuestra mente y pensamientos y “alimentar el cerebro de glucosa, oxigeno, proteínas, grasas buenas (omega 3), pero sobre todo de amor y vínculo social”, como nos recomienda el neurólogo Ciro Gaona.
A pesar de todas las dificultades que se nos presentan en la vida, podemos ser felices, viviendo a plenitud el momento presente, para esto es indispensable cultivar el vínculo social, compartiendo, sin aislarnos, pues el aislamiento nos deteriora física, mental, emocional y espiritualmente.
Frente a esta realidad en la que estamos viviendo es saludable compartir por las redes con otros seres humanos, pero sin abandonar el contacto personal cara a cara con los demás, compartiendo sonrisas, sin mascarillas, abrazándonos sin distanciamiento social y aunque parezca ilógico lo que estoy expresando aquí, puedo asegurarles que de seguir aislados, habrán muchos niños y adolescentes con daños irreparables, adultos ansiosos, estresados, con reacciones y comportamientos insoportables y ancianos que seguirán muriendo por falta de amor.
Recomiendo salir de las casas, hay que activarse, salga para la plaza a caminar, al parque, vaya a la playa, aproveche y salude con cariño a todo el que vea, baile en una plaza abierta donde hayan otros bailando, y si no, baile en su casa con sus familiares, o baile solo, pero muévase, oiga música, vívala, es la mejor terapia para el cerebro, toque un instrumento, llene sopas de letras, juegos de mesa en familia, vean una película juntos, de vez en cuando tómese una copa de vino, dedíquele tiempo a la cocina, todo esto contribuirá con su salud mental.
No puede dejar de cultivar su espiritualidad, le ayudará a perder el miedo a enfermarse, el miedo a la muerte, a la gente, al futuro. Ore, medite, relájese, con la corriente que sea, no importa, pero no se descompense, armonice sus energías, sus chakras, invoque al Espíritu Santo y fomente su fe.
En sus oraciones deséele el bien a los demás, pida por otros, pero sobre todo dé gracias a Dios por todo y no olvide ayudar a los que tienen menos que usted.
Todo esto, querido hermano, usando su mascarilla, aunque la baje para sonreír, lavándose bien sus manos, y abrazando a los familiares cercanos, aunque no abran la boca, el abrazo es indispensable para sobrevivir, y para la salud física, mental, emocional y espiritual.
Víctor Martínez se despide hasta la próxima.




