REFLEXIONES: Mi hermano pueblo de Haití
AYUDAME A SALVAR UNA VIDA
Hola amigos, ¿qué tal? Le llamo hermano pueblo de Haití, porque hemos crecido juntos, nos hemos criado juntos y aunque no nos llevemos bien como hermanos, a veces hemos compartido momentos de penas y alegrías.
Nos parecemos a Caín y Abel, claro, historia de la cual no voy a hablar, pero que todos conocemos.
Mi desordenado hermano pueblo de Haití, lleno de anarquía y criminalidad, secuestros, bandas, vive resentido con su pueblo hermano dominicano, por su histórico pasado, que nunca han aceptado con humildad.
Piensan que los dominicanos le hemos quitado lo que es de ellos, razón por la que en estos momentos y desde hace muchos años, han decidido invadirnos pacíficamente, pienso hoy, que casi se están levantando violentamente contra nosotros, quienes le hemos dado refugio y acogida, a pesar de estar conscientes de sus pensamientos y sentimientos hacia nosotros.
Hemos compartido con ellos, trabajo, comida, medicina, educación, de todo, extendiéndoles nuestra mano amiga, sin embargo, siento que hemos estado durmiendo con el enemigo, quien nos ha dejado inmerso en un hipnotismo profundo, del que no acabamos de salir, de despertar.
Hoy la estabilidad de ese país corre más peligro que nunca, por consiguiente nosotros también, es esta la razón por la que pido a todas las Iglesias, Religiones, Grupos de Meditaciones, sin importar filosofía o creencia, que invoquemos al Todopoderoso, Creador del cielo y la tierra, Rey del Universo, para que envuelva a nuestra isla en un manto de paz, de amor, de energías, que vibren en las más altas frecuencias, para que nos proteja de las fuerzas del mal y de todo aquello que nos pueda dañar.
Víctor Martínez te recuerda dominicano, que nosotros somos luchadores de naturaleza y que siempre hemos defendido nuestra Patria, en busca de la Libertad y bendecidos por Dios.
Que viva la República Dominicana, y que veamos nuestra bandera ondear siempre, exhibiendo su escudo con la Cruz, la Biblia y el emblema de Dios Patria y Libertad.
Hasta la próxima.
