Con la droga de Barahona, hubo ganadores y ahora perdedores… ¡Cógelo, Picante!

Buenas días…

Nueva vez, la soga vuelve a partirse por la parte más fino…

Con la droga de Barahona, no están todos los que son, ni son todos los que están…  a unos los premiaron y a otros, lo castigaron.

Al defensor del Pueblo, lo azotaron, ahora, lo venció el poder.

Primero fue en la DIGESETT, donde se salvó la coronela Ysabelita de los Santos, que fusta en mano, les dio sus azotes al defensor del Pueblo y a su comitiva, para que no metieran sus narices, donde no debían.

Le dieron larga y larga al asunto, para que el caso se enfriara, y al final, todo se derrumbó, nada pasó.

La agresora fue beneficiada por un juez, que dictó un no ha lugar a su favor, y el defensor del Pueblo, se quedó con sus fuetazos.

Desde luego, para nadie es un secreto que la coronela agresora recibió órdenes de no permitir la entrada del defensor del Pueblo al Canódromo.

¿Quién transmitió la orden?  Eso lo saben hasta los chinos de Bonao. El arlequín se lavó las manos como Pilato, aunque al final, tal y como se esperaba, todo se derrumbó.

Ahora, vuelve y se parte la soga por la parte más fina. Cancelaron a los más chiquitos, como para que la gente deje de preguntar, ¿y qué pasó con la droga de Barahona? Cancelaron a los chiquitos. ¿y los jefes dónde están?

Todos los jefes fueron premiados por el presidente Luis Abinader, con ascensos y designaciones.  Y al que le pique, que se rasque.

En materia de justicia, estamos “cambiando”, pero como el cangrejo.

Por cierto, la situación de la Procuraduría está, cada día, más tenebrosa, color de hormiga. No se sabe, en realidad, cuál de las dos es la más fuerte.

Lo cierto es que Yeni Berenice, la flamante procuradora, según nos dijeron, tiene engavetado el expediente de la mafia de los combustibles en la Policía.

¿Será cierto que Yeni Berenice quiere impedir que un tal Ney Aldrin, y el otro, vayan a residir a Najayo, donde deben de estar, hasta por la quiebra de la cooperativa de los policías.

Y mientras tanto, en ciertos casos de corrupción, sí hay independencia, en otros, y en cambio, tienen las manos metidas hasta el fondo.

Si en República Dominicana no hubiera impunidad, el caso de INESPRE estaría en el Centro de los Héroes.

Nos comentan que en INESPRE se repitió la historia de la época de José Michelén, y nada ha pasado.

Como dice la canción, en la República Dominicana, todo se derrumbó, hasta la lucha por la transparencia e impunidad.

Por cierto, nos hicieron saber que esa cosa que se usó como un engaño, como un trampolín y que decía ser “marcha verde”, cayó en el mal, ahora es azul, y desapareció junto con la ética y la transparencia.

Los dueños de ese circo, que sí dio excelentes resultados a sus propulsores, todos están en los altares, y nos cogieron de trampolín, nos vendieron una falsa ilusión.

Recuerden, quien siembra viento cosecha tempestad, y quien siembra ilusiones, cosecha muchas desilusiones y decepciones.

Por cierto, hay tantas desilusiones en el país, que es lo único que está barato y se encuentra por dondequiera.

Se oye, por dondequiera, el griterío de la gente con la nueva carrera alcista de los precios de productos alimenticios y farmacéuticos.

Por cierto, la tasa cero para 67 productos, que Pinocho dijo que era para “proteger a la población”, únicamente provocó quiebras de sectores productivos dominicanos, y pingües beneficios para un grupito.

Pero, gracias a Dios que en este país, únicamente bajan quienes siembran ilusiones.

Ya nos vamos, el futuro inmediato del país, en materia de precios, se torna picante, los pronósticos son deprimentes y hasta la prima del dólar, se aproxima a los 57.