Haití al borde del desastre; bandas asesinan a otros 2 policías
Dicen que las autoridades se mantienen indiferentes ante situación y únicamente luchan por retener el poder

PUERTO PRÍNCIPE., Haití
Haití está al borde de un desastre de seguridad.
La inseguridad en este país es espantosa, mientras que la población teme que en cualquier momento puede ocurrir una catástrofe, incluso, que los líderes criminales se apoderen del poder.
Las pandillas lucen unificadas, con claros objetivos, aterrorizar al país, sembrar el caos y desplazar del poder a sus “autoridades”, que contrario a los criminales, mantienen una pugna.
Para algunos sectores, incluyendo políticos y empresarios, la situación haitiana está en “cuidado intensivo”, y sin medicamentos para enfrentar esa gravedad, pues sus autoridades se mantienen indiferentes y únicamente luchan por retener el poder.
En las últimas dos semanas, en Haití la violencia se ha incrementado de manera alarmante, preocupante, y cerca de medio centenar de ciudadanos han sido asesinados por pandilleros, incluyendo tres miembros de la seguridad nacional, en menos de 72 horas.
Las bandas armadas, encabezadas por su jefe, Vitel’Homme Innocent, asesinaron, entre la noche del 16 y la madrugada del 17 de febrero, al menos a 20 personas, a pocos kilómetros de la embajada de Estados Unidos, en Puerto Príncipe.
Entre las víctimas, en la zona de Chateaublond, en Tabarre, se encuentran 5 miembros de una misma familia.
Esta masacre se produjo como represalia de los criminales contra la población civil, porque supuestamente informaron a la policía sobre las actividades de los criminales en esa zona.
Pero esto no quedó ahí, pues el pasado lunes la policía eliminó a 5 presuntos pandilleros, durante una operación en la comuna de Léogâne, donde las autoridades incautaron dos fusiles M4 y una pistola 9 milímetros.
Puerto Príncipe se ahoga en el caos, dicen ciudadanos, mientras pandillas toman control de gran parte de la capital haitiana.
La ONU, por su parte, ha reportado masacres, desplazamientos masivos y ataques contra civiles, incluyendo niños, a pesar de la presencia de la misión de seguridad, que está encabezada por Kenia, calificando la situación como “inaceptable e inhumana».
El martes, en un atentado perpetrado por miembros de la coalición «Viv Ansanm«, en Delmas 30, dos militares de las Fuerzas Armadas de Haití, identificados como Eric Jean y Kempès Basile, fueron asesinados, elevándose a tres el número de soldados muertos en menos de dos semanas.
Las bandas han incendiado casas, obligando a muchos ciudadanos a huir y otros, por su propia decisión, huyen para escapar de la violencia.
Haití, cada día, se acerca al colapso, y en el horizonte no se vislumbra ninguna solución, como si los ciudadanos del empobrecido país estuviesen condenados a vivir en inseguridad, en medio de un desastre y un caos total.