Dan como un hecho que el general De los Santos será el próximo jefe de la PN

Buenos días…

Mientras en Bruselas se sientan a “discutir la paz”, en Ucrania las bombas siguen cayendo y los muertos siguen contando…La guerra avanza, los precios suben, y la paz, como siempre, no está en agenda.Lo que acaba de pasar en El Seibo, tierra del propio director de la Policía, no tiene perdón de Dios. Y lo peor: ya hay versiones que huelen a podrido, y la Procuraduría General debe meter la mano urgente antes de que este escándalo se les vaya de control.

La Policía anunció con fanfarria que, junto al Ministerio Público, ocupó más de 3 mil gramos de drogas, un chaleco antibalas, balanzas y dinero en efectivo en un allanamiento en el sector Ginandiana, de El Seibo.

Un operativo de película, con fotos, aplausos y hasta agentes diciendo “¡caíste, capo!”. Pero el “gran golpe” se desinfló como una vejiga.

El detenido, Félix Alexander del Rosario, horas después fue dejado libre, “pura y simple”, por el Tribunal de Atención Permanente de El Seibo. ¿La razón? Que se le violaron sus derechos fundamentales.

Sí, leyó bien: ¡lo agarran con droga y chaleco, y sale caminando por la puerta grande!

El expediente se cae porque la orden de allanamiento era para una dirección, y lo hicieron en otra.

Después de eso, empezaron los rumores: que el allanamiento fue un montaje, que hubo chantaje y peaje, y que el hombre “aportaba” 150 mil pesos semanales, pero cuando le subieron la tarifa a 200 mil, se rebeló. Y ahí comenzó su “problema”.

Según versiones, cuando se negó a pagar, lo amenazaron con apresarlo… y él respondió: “Si caigo preso, hablo”.

Entonces cambiaron la dirección del allanamiento, lo pescaron y lo exhibieron como trofeo. Pero el tiro les salió por la culata.

Si eso es cierto, la Procuraduría tiene que investigar, caiga quien caiga, porque ese expediente tiene más cocoricamo que un gallo de pelea.

Y mientras eso arde en El Seibo… en los pasillos del poder ya dan como un hecho que el general Frank de los Santos, actual jefe policial en San Juan, será el nuevo director de la Policía Nacional.

Dicen que ya tiene el traje listo, y que la información salió directo desde una asistente del Palacio. ¡Ave María Purísima!

¿Otro del PLD al frente de una institución clave del gobierno del PRM? Como dice el refrán: aunque se vista de azul, morado es… y sigue siendo morado por dentro.

Y si ese nombramiento se concreta, prepárense… porque en la finca del Toro, en Guerra, ya están afinando la güira y el tambor. Sonará “Volveré”.

Y mientras tanto, la Digesett sigue dando vergüenza en redes… Los videos de abusos, atropellos y “teteos uniformados” se multiplican.

Y la Procuraduría sigue muda ante la masacre de La Barranquita. Todos sabemos que hay “cabezas” detrás de ese baño de sangre, pero nadie las toca.

En Gaza, Trump habla de paz… Netanyahu de guerra.

Aquí, Abinader habla de reforma policial… y los delincuentes se ríen.

Presidente, si cuando Guzmán Peralta cumpla sus dos años usted pone a dirigir la PN a un oficial cuestionado o con pasado político, la delincuencia no tendrá freno, y la gente buena no tendrá paz.

Pero, Guzmán Peralta no tiene que cumplir dos años, debió de ser destituido desde el mismo momento de la triple ejecución del 12 Haina, tal y como lo establece el artículo número 23, de la Ley 590-16,  en su párrafo. Porque, como van las cosas, la República Dominicana está al borde del caos.

Y si el gobierno no reacciona, los delincuentes no solo mandarán… harán fila para cobrar su cheque en Palacio. Nos vemos, como todo, esto es un relajo.